Halloween es la época propicia para estar en la onda de los fantasmas y los personajes paranormales y es precisamente en esos días, cuando salen a relucir las historias extraordinarias de casas y lugares embrujados que albergan sus propios misterios.
En varias de las ciudades principales de Colombia, se encuentran las llamadas casas embrujadas, que con fantasma a bordo llaman poderosamente la atención.
Las casas embrujadas de Colombia
De acuerdo a lo que se registra en el portal Colombia Visible, estas son algunas de las casas embrujadas más conocidas en las principales ciudades de Colombia:
- El fantasma que regala mangos en Envigado
En Envigado, Antioquia, se encuentra el barrio La Magnolia, en donde se encuentra una casa que tiene un gran árbol de mango, cerca del cual aparece un niño a ofrecer mangos maduros a quienes juegan con él.
Se dice que el fantasma del niño que regala mangos llegó a ser peligroso para una familia que vivió allí a mediados de 1990, debido a que casi logra que un joven que jugaba con él se suicidara (para convertirse en su eterno amigo de juegos). Sin embargo, quienes la habitan en este momento dicen que se han a costumbrado a su presencia y que este es inofensivo.
De a cuerdo a lo que relata la leyenda, este fantasma es el espíritu de un niño indígena que vivió en el lugar ya que cuando hicieron una excavación alrededor del árbol de mangos, encontraron un cofre que guardaba los huesos de un niño, ropas y juguetes.
- El restaurante La Bruja en Bogotá
Este restaurante se encuentra ubicado en el barrio La Candelaria y antes de su construcción fue un sitio que sirvió de calabozo en la época de Rojas Pinilla.
Alrededor de la presencia de un ser paranormal hay dos teorías: la primera, se refiere a una señora que en visitaba frecuentemente el calabozo para preguntar por su hijo. Llevaba comida para los guardias y cómo sabía leer el tarot, les contaba su futuro y podía tener contacto con los muertos.
Otra versión de la historia se refiere relata que la señora desesperada por no encontrar a su hijo, enloqueció y murió luego de un tiempo en una completa soledad. De acuerdo a esto, su alma es la que se le aparece a los empleados y visitantes del restaurante.
Aunque esta sea solo una leyenda, los trabajadores del restaurante aseguran que hay un fantasma que ronda la cocina, les cambia las cosas de lugar, les desamarra los delantales, les da palmadas en la espalda y a algunos les ha soplado en la cara ,razones por las cuales más de uno ha renunciado.
- La Casa del Diablo en Ciénaga, Magdalena
Cuenta la leyenda que, a principios del siglo XX, un hombre de escasos recursos llamado Manuel Varela realizó un pacto con el diablo para obtener riquezas y prosperidad a cambio del alma de sus trabajadores.
Tras su muerte, a mediados de la década de los 50, la comunidad dijo que, en su mansión, llamada Manuelita, empezaron a pasar supuestos fenómenos paranormales, y fue entonces cuando le dieron el nombre de Casa del diablo
Muchos creen que hay fuerzas diabólicas viviendo en ese lugar, e incluso aseguran que por la noche huele a azufre, además de que es posible ver ojos rojos asomándose desde las ventanas.
- El Castillo de Alboraya en Barranquilla
Según cuenta la leyenda, el dueño de esta propiedad era un español mestizo de apellido Rondón, famoso por sacar sus caballos en las noches y por el maltrato al que sometía a sus esclavos.
Se dice que este personaje salía en las noches en busca de niños y hombres del sector para llevarlos a su casa y torturarlos.
Hoy en día, el castillo abandonado y en ruinas , pero los vecinos del sector aseguran escuchar a caballos relinchar y galopar en la medianoche, además de gritos y lamentos que supuestamente provienen de este lugar embrujado.