La Catedral de Sal es una impresionante mina de sal, se encuentra en el municipio de Zipaquirá, en el departamento de Cundinamarca, incrustada en el Cerro del Zipa, a 2.652 metros sobre el nivel del mar, con una temperatura promedio de 14 °C.
Fue en 1995 cuando se inauguró esta nueva estructura de la mina de sal, tras la inestabilidad de la antigua mina. Esta nueva edificación, ubicada a 180 metros bajo tierra, requirió la extracción de 250 mil toneladas de roca salina y es reconocida como la mayor reserva de roca sal en el mundo, destaca ProColombia.
Al ingresar a la mina, sus visitantes empiezan a vivir una experiencia única sintiendo el olor a minerales que siempre está presente, así como la oscuridad que envuelve todo el lugar, brindando durante su recorrido un espectáculo de luces que revela la roca tallada y los túneles que albergan las estaciones del viacrucis.
Al final, se accede a tres grandes naves: la del ‘nacimiento y bautismo’, la de la ‘vida y la muerte’, y la de la ‘resurrección’, cada una con su respectivo altar. Aunque este plan puede ser interesante para los fieles creyentes, no significa que la Catedral de Sal de Zipaquirá y su municipio no tengan nada más que ofrecer, pues durante años se ha trabajo en fortalecer su oferta turística con un abanico de actividades para disfrutar, bien sea en familia, con amigos o en pareja.
Uno de estos espacios imperdibles es el ‘Museo Subterráneo Monumental 180′, que fue inaugurado en mayo de este 2024 como un homenaje al arte y la cultura colombiana, donde sus visitantes pueden admirar 11 esculturas en relieve y 11 en bloque de mármol, creadas por talentosos artistas de todo el mundo.
Esta nueva atracción se distingue por ser el primer museo natural bajo tierra del mundo, que busca ofrecer una perspectiva única de la arquitectura a través de innovadores murales, mientras se aprende de su rica en historia y arte arquitectónico.
“Hacemos referencia a la gran riqueza cultural de países como Colombia, Rusia, Nueva Zelanda, Costa Rica, Rumania, Corea del Sur, México, Chile, China, Japón, Ucrania y doce naciones más”, dijo en su momento la gerencia de la mina.
Por su parte, Roberto Carlos Roa Cote, gerente general del museo, explicó al diario El Tiempo que la idea de crear este espacio surgió de la necesidad de reencontrar a Latinoamérica con la escultura, una expresión cultural que había perdido relevancia en las últimas décadas. Además, detalló que para lograr su objetivo se convocaron 22 artistas de diversos países, quienes tuvieron treinta días para completar sus obras bajo el tema ‘La ancestralidad y símbolo’.
“Había necesidad en Latinoamérica y particularmente en Colombia de reencontrarnos con la escultura, la cual es una de las más hermosas expresiones de la cultura universal. Y en Colombia, desde las décadas de los 50, se estaba perdiendo. Este fue una idea con el ánimo de reencontrarnos en Latinoamérica y eso motivó a que invitáramos a 22 artistas de todo el mundo a que recuperemos, a través de este hermoso museo, la exponencial e importante idea de la escultura monumental”, mencionó Roa.
Vale recordar que los visitantes nacionales e internacionales de la Catedral de Sal de Zipaquirá pueden adquirir sus entradas a través de su página web oficial www.catedraldesal.gov.co y sumergirse en una experiencia única.