En Edimburgo hay mucho más por descubrir que el castillo encaramado en su promontorio o los lugares que inspiraron la historia de Harry Potter. Ahora, quienes viajan a la capital de Escocia tendrán la oportunidad de conocer la ciudad de una forma distinta gracias a la compañía de nuevos guías turísticos que hacen parte de la asociación “Invisible Cities”.

Los encargados en transformar las experiencias de los viajeros son personas, antes sin domicilio fijo, reconvertidas en guías turísticos. Este es el caso de Sonny Murray, uno de los 18 guías de esta asociación. Cada recorrido, diseñado tanto para locales como para turistas, es único. El suyo, centrado en el crimen, se inicia en el lugar donde se erigía una antigua horca.

Comienza con una breve introducción sobre “Invisible Cities”, asociación fundada en 2016 en Edimburgo. Su objetivo es “ayudar a personas que estaban sin hogar como yo, ofrecerles empleo y formación, pero también mostrar un aspecto de Edimburgo diferente al propuesto por los guías turísticos habituales”, explica.

Murray, de 45 años, avanza con paso firme y no escatima en bromas. Cuenta la historia de Deacon Brodie, un personaje que vivió en Edimburgo en el siglo XVIII.

Durante el día era un miembro respetado de la sociedad pero por la noche se transformaba en un peligroso criminal. Se dice que inspiró “El extraño caso del doctor Jekyll y Mr. Hyde”, del escritor escocés Robert Louis Stevenson.

La posibilidad de descubrir la ciudad escocesa desde un nuevo ángulo, gracias a personas que antes no tenían hogar y se han convertido en guías. | Foto: AFP or licensors

El guía también suele detenerse frente a las asociaciones que lo ayudaron en sus momentos más difíciles y relatar parte de su pasado: “fue muy duro. Era adicto a las drogas y a otras cosas. Robaba en tiendas, entraba y salía de la cárcel constantemente. Y cuando salía, vivía en la calle”.

Además, sobre el cambio de su estilo de vida, Sonny señala la principal organización benéfica escocesa de ayuda a las personas sin hogar, “The Simon Community”, a donde recurría todo el tiempo después de no poder ducharse ni lavar su ripa por días.

En Escocia, más de 30.000 familias se encuentran sin hogar. En total, son unas 53.000 personas, de las que más de 15.000 son niños. Muchos viven en centros de acogida.

“Invisible Cities” fue creada por Zakia Moulaoui Guery, una francesa que llegó a Edimburgo para enseñar su idioma. Luego trabajó en eventos, incluyendo un torneo de fútbol con personas sin hogar, antes de decidir lanzar su propio proyecto. “Cuando vives en la calle la gente no te ve. Uno se vuelve invisible”, comenta.

“Darles a estas personas la oportunidad de ser visibles, de estar en el centro de atención y liderar una visita, me parece importante”, añade Zakia, reiterando que el propósito de la asociación es proporcionar una red de apoyo, un sentido de pertenencia a un grupo y un entorno positivo.

Durante los recorridos los guías turísticos también suelen compartir su historia de vida. | Foto: AFP or licensors

Alrededor de 130 guías fueron formados hasta ahora

Las visitas ofrecen la posibilidad de “ir más allá de la postal turística”, destaca Zakia.

En Edimburgo “podemos hablar del castillo, de Victoria Street, de Harry Potter y de todas las cosas que hacen mágica a la ciudad, pero también podemos tratar temas reales”, explica.

Los recorridos de “Invisible Cities” están disponibles en varias ciudades de Reino Unido, entre ellas Mánchester, Liverpool y Cardiff, todos ofreciendo una perspectiva diferente de la ciudad, sin dejar pasar por alto su conocida y rica combinación de historia, cultura y paisajes únicos, que atraen cada año a miles de turistas.

* Con información de AFP