Desde el 20 de agosto, el Parque Nacional Natural El Cocuy, una de las joyas ecológicas más apreciadas de Colombia, permanece cerrado para turistas y operadores.
Esta medida responde a una decisión tomada por la comunidad indígena u’wa, quienes han emprendido una serie de acciones con el objetivo de reivindicar sus derechos territoriales y sociales. El cierre del parque se mantendrá hasta el 22 de agosto.
La Nación Indígena U’wa, junto con diversas organizaciones sociales, ha bloqueado no solo el acceso al Parque Nacional Natural El Cocuy, sino también la planta de gas Gibraltar, un punto clave en la infraestructura energética de la zona. Esta protesta busca llamar la atención del Gobierno nacional sobre la necesidad urgente de cumplir con los derechos que les corresponden como pueblo indígena.
El Parque Nacional Natural El Cocuy, ubicado en la región de los Andes y conocido por su impresionante biodiversidad y paisajes de alta montaña, ha sido un importante destino para el ecoturismo en Colombia. Su cierre temporal no solo afecta a los turistas que habían planeado visitar el parque, sino también a los operadores turísticos y a las comunidades locales que dependen económicamente del flujo de visitantes.
El bloqueo de la planta de gas Gibraltar añade otra capa de complejidad a la situación. Esta planta es una infraestructura crítica para la producción y distribución de gas en la región, y su cierre impacta directamente en la economía local y en el suministro de energía. La comunidad u’wa ha utilizado estas acciones como una herramienta para presionar al gobierno, subrayando la urgencia de abordar sus demandas y asegurar el respeto a sus derechos.
“Nuestra intención no es afectar los derechos de las comunidades menos favorecidas del centro Oriente de Colombia, especialmente de la región del Sarare, ni los derechos de las comunidades campesinas de los municipios de Güicán, el Cocuy, que tienen influencia en el Parque Natural el Cocuy, esta decisión afecta los instrumentos y brazos del capitalismo, como lo es la empresa ECOPETROL y sus filiales encargados de mantener la explotación de petróleo y gas en nuestra región, dejando solo sobras y desastre en este bello entorno del Sarare”, detalló la Nación Indígena U’wa, en un comunicado.
El Gobierno nacional se encuentra bajo presión para responder a estas demandas y encontrar una solución que satisfaga tanto a la comunidad u’wa como a los otros actores involucrados. Las negociaciones y el diálogo son fundamentales en este proceso, y la comunidad indígena ha señalado su disposición a continuar con las conversaciones siempre y cuando se respeten sus derechos y se tomen medidas concretas para abordar sus preocupaciones.
Mientras tanto, el cierre del Parque Nacional Natural El Cocuy y el bloqueo de la planta de gas continúan, y la situación se mantiene en un estado de incertidumbre. Las autoridades locales y nacionales están trabajando para mediar en la crisis y buscar una resolución que permita reabrir el parque y restablecer el funcionamiento normal de la planta de gas, al mismo tiempo que se abordan las demandas de la comunidad u’wa.