Villavicencio es una ciudad clave en la cultura llanera, que ofrece diversidad de alternativas turísticas tanto para propios como para extraños. Las expresiones culturales típicas, ya sea una banda de música llanera formada por arpa, cuatro, tiple y maracas, o bailarines de joropo, son características en la capital del Meta.
En este lugar, además, se pueden encontrar restaurantes en los que es posible apreciar los sabores regionales, como la ternera a la llanera, uno de los platos típicos de la región. Villavicencio es una ciudad apropiada para visitar en familia, pero también para realizar planes en pareja.
En esta capital se realizan actividades de gran reconocimiento y que atraen una gran cantidad de turistas. Una de ellas es el Torneo Internacional del joropo, un encuentro de varios días se reúne a los mejores bailarines de toda la Orinoquia.
También tiene lugar en Villavicencio el Encuentro Mundial de Coleo, que consiste en rodear toros y tomarlos por la cola hasta derribarlos. Esta actividad es llevada a cabo por hábiles jinetes. El evento también incluye demostraciones de otras artes ecuestres y conciertos de música tradicional.
Y aunque estos son planes que se prestan para realizar en pareja, también hay otros que resultan atractivos y que podrían ser imperdibles cuando se está de visita en la región. Uno de ellos es llegar hasta el Mirador la Piedra del Amor, un punto panorámico en la parte oeste de la ciudad, en donde se puede disfrutar de las mejores vistas de ella y de la región circundante. Allí es posible pasear por en medio de una selección de esculturas y probar los platos regionales en los restaurantes que allí se encuentran.
Parque de Las Malocas
Este es uno de los lugares emblemáticos de la cultura llanera, según el portal Villavicencio Turismo. Allí los viajeros pueden conocer las actividades más representativas de la región desde el punto de vista cultural. Para ello, el parque cuenta con guías especializados en el tema. Los viajeros pueden interactuar con los diversos ambientes tradicionales, así como las actividades cotidianas de la vida rural llanera.
Además, el parque ofrece la posibilidad de realizar diferentes recorridos. Esto, con el fin de que los visitantes aprendan no solo de las actividades cotidianas, sino también de la riqueza cultural del llano. Aquí es posible enterarse de los mitos y leyendas que abundan dentro del repertorio cultural de la región.
También es viable ir en pareja y disfrutar de su oferta turística, al Bioparque Los Ocarros. Allí es posible tener un aprendizaje sobre la fauna y la flora de la Orinoquia. El nombre de este lugar corresponde a un armadillo gigante que excava las madrigueras en las que duerme y que puede superar los 40 kilogramos de peso, según el portal Colombia Travel.
En este lugar los visitantes tienen la posibilidad de apreciar de cerca animales tales como anacondas, micos, nutrias, chigüiros, venados, cocodrilos del Orinoco, babillas, tortugas y osos, entre otros.
Una última alternativa es el Parque Los Fundadores, el más grande de Villavicencio. Cuenta con una plazoleta en cuyo centro se levanta el monumento a los Fundadores, del artista Rodrigo Arenas Betancourt; tiene plaza de comidas, plazoleta infantil, teatrino y plaza de los enamorados. En el parque se recorren senderos peatonales y se tiene acceso a una fuente de agua.