Una capa blanca y espesa se posa sobre todo el suelo, los techos de las casas y los árboles de Chicago. Ese día ha nevado y así recibe la ciudad el avión que está a punto de aterrizar, de la aerolínea Avianca, desde Bogotá. El piloto sobrevuela la capital de Illinois para aterrizar en el Aeropuerto Internacional O’Hare en medio de una nevada que marca el comienzo del invierno. Desde las ventanas del avión solo se ven nubes y algo más de la mitad del ala de la aeronave, la nubosidad es densa.
Las condiciones hacen que el piloto tenga que sobrevolar la ciudad un par de minutos más de lo esperado. Aunque solo se ven nubes, el sonido del tren de aterrizaje siendo desplegado avisa que el piloto está a punto de tocar tierra firme. Tras unos minutos más de sobrevuelo, el avión finalmente logra aterrizar en la pista. Ese día ha nevado en Chicago, como un presagio a la llegada del invierno, la Navidad y el Día de Acción de Gracias (Thanksgiving), que se celebra el 28 de noviembre en todos los Estados Unidos.
La temperatura oficial es de menos de un grado, y la sensación térmica de menos de cinco. Dentro del aeropuerto la calefacción no deja sentir el verdadero frío que hace una vez se pasa la puerta, pero la nieve maravilla más de lo que asusta el frío. No hace falta más que ponerse unos guantes, un gorro, una buena chaqueta, para pasar la puerta y admirar la nieve que cubre toda la ciudad. Es un espectáculo.
SEMANA llegó hasta Chicago para conocer más de esta ciudad, en la que incluso sentir el frío y los vientos hace parte de la experiencia de vivirla en el invierno.
Chicago fue elegida este 2024 por octava vez consecutiva como la mejor gran ciudad de los Estados Unidos. ¿Cómo lo logró? Es una respuesta que solo se encuentra viviendo sus calles, los barrios, viendo su imponente arquitectura, los rascacielos, probando su exquisita gastronomía, disfrutando el entretenimiento y los deportes o deleitándose con la música y la cultura que ofrece a locales y turistas.
Arquitectura
Resulta impresionante sentirse pequeño al lado de edificios de casi medio kilómetro de alto, como la Trump Tower, el edificio de propiedad del magnate y hoy presidente electo de ese país, Donald Trump. El edificio mide 423,2 metros y está ubicado en una de las principales avenidas de la ciudad, que se posa junto al río Chicago, el cual desemboca en el lago Michigan, una gran península al norte de Estados Unidos donde está ubicada la ciudad.
La sensación de ver esos rascacielos es comparable con lo que se vive la primera vez que una persona llega a Manhattan en Nueva York. De hecho, Chicago es referenciada en ocasiones con algunas similitudes con la Gran Manzana, aunque cada ciudad tiene su atributos y encantos.
Los dos edificios más altos de Chicago son el Skydeck y el 360 Chicago Observation Deck, en donde por unos 30 dólares (132.000 pesos) por cada uno, quien desee puede subir hasta el piso más alto para admirar la ciudad. Las vistas son impresionantes, y las fotos también.
En el caso del 360 Chicago, en el último piso, el visitante encontrará una vista privilegiada hacia todos los puntos de la ciudad. Allí se ven las grandes avenidas decoradas de luces que permiten sentir la inmensidad. Por un pago extra podrá vivir la experiencia de ser inclinado a través de un vidrio transparente para ver la ciudad desde sus pies, una sensación de vacío que reta a los visitantes.
En el Skydeck pasa algo similar. Sin embargo, allí cualquier persona que haya ingresado con su tiquete podrá pararse en un vidrio que deja ver lo alto que se encuentra en ese momento. Otro gran reto para los que le temen al vértigo, pero sin duda una experiencia inigualable.
El río Chicago es la base de la ciudad. Recorrerlo a pie o en otros medios de transporte es un plan obligado sin importar la temporada. Allí no solo se podrán tomar las mejores fotos, sino que es por donde se puede admirar y conocer la mejor arquitectura de Chicago y toda su historia.
Se puede adquirir un paseo en bote que sale desde Navy Pier (donde está la característica rueda de la ciudad) en el que un guía contará toda la historia de la ciudad mientras se admira los rascacielos navegando desde el río. A donde se mire es magnífico y, de paso, se van conociendo las razones de la arquitectura, sus colores y diseños. El paseo dura alrededor de 90 minutos, en los que podrá observar la imponente arquitectura del centro de Chicago desde el río.
En el recorrido de la ciudad no se puede olvidar el característico The Bean, una escultura gris de gran tamaño —que parece un fríjol, de ahí su nombre— ubicada en el Millennium Park, convirtiéndose en el punto más referente de la ciudad.
Uno de sus atributos es la imagen que se refleja a través del metal gris, generando que se convierta en toda una atracción para personas de todas las edades que buscan tomarse la icónica fotografía en el lugar. No es posible decir que se visitó Chicago sin tener una foto allí. Una de las recomendaciones es ir en horas de la mañana, momento en el que no asisten tantos turistas como en otras horas del día.
¿Por qué Chicago es lo que es hoy en día? La ciudad resurgió de las cenizas, literalmente. El 8 de octubre de 1871 se registró un incendio en el granero O’Leary, al suroeste de la ciudad. El fuego se expandió rápidamente acabando con unos 17.500 edificios. Una de las razones para que se propagara rápidamente la conflagración es que varias de las edificaciones estaban construidas en madera. Lección aprendida.
El incendio fue causado por una vaca que escapó de un establo, provocando la conflagración que pudo ser controlada solo hasta el día siguiente.
Chicago es conocida como ‘La ciudad de los vientos’. Basta con estar parado en cualquiera de sus calles para comprobar las fuertes oleadas que pasan entre sus edificaciones y sentir una gran ráfaga de frío.
Gracias a los vientos fue que el incendio se expandió rápidamente. Según la guía del barco, y otras personas encargadas de contar la historia de la ciudad, en ese momento, los arquitectos y pensadores de la época se preguntaron: ¿vale la pena reconstruir la ciudad o que los residentes migraran a otra parte del país? En una desafiante y retadora decisión, anunciaron que reconstruirán la ciudad desde cero y con las lecciones aprendidas harían una infraestructura y edificios tan resistentes a las condiciones del lugar que algo así nunca más volvería a suceder.
Eso llevó a lo que se puede observar hoy en Chicago y que solo se puede conocer al visitar la ciudad, recorrer sus calles y admirar los rascacielos desde abajo o desde arriba, una experiencia que no se puede contar y que cada uno tiene que vivir. Es una admiración constante por la arquitectura que no se deja de sentir en ningún momento de todo el viaje.
Gastronomía
Muchas veces, al viajar a los Estados Unidos, en el imaginario de las personas sobre la comida están las hamburguesas, los hot dogs (perros calientes) y las pizzas al estilo americano. Pero Chicago ofrece más que eso.
La ciudad de los vientos es un sitio predilecto para probar una gastronomía de primer nivel y platos típicos de distintos países adaptados a la ciudad por los mejores chefs con reconocimientos a nivel mundial.
Algunas opciones son el Time Out Market, una plazoleta en la que se podrán elegir distintos platos como sushi, ramen, sánduches, entre otros. También se encuentran sitios de comida de otros países de primera calidad, italianos como Acantu o peruanos como Tanta; hasta una feria gastronómica alemana en donde podrá tomarse un chocolate o una sidra caliente o comerse una salchicha con mostaza típica de ese país que deleitará su paladar, aunque esto solo se debe a la temporada.
Chicago es una ciudad que reúne distintas culturas que se pueden encontrar en cada uno de sus barrios, como Chinatown (el barrio chino), entre otros. Está dividida en 77 barrios, todos tan diversos y encantadores que encontrará toda una diversidad cultural.
En el caso de los amantes de los dulces también podrá deleitar el paladar con sitios como JoJo ‘s Shake Bar, en donde encontrará una diversidad de malteadas y platos perfectos para los niños o los que desean inyectar una carga de calorías a su cuerpo. El sitio es decorado con árboles navideños por la temporada y luces que mejoran significativamente la experiencia.
Uno de los infaltables es la pizza al estilo Chicago, que se encuentra en el icónico lugar Giordano ‘s.
Arte y cultura
Los museos y el entretenimiento son otros de los atractivos de Chicago. Puede recorrer el Instituto de Arte, donde están exhibidas varias obras históricas como El dormitorio de Vincent van Gogh o el Gótico Americano de Grant Wood.
Para los menores de edad y la familia también son recomendados lugares como el Shedd Aquarium, el Field Museum (Museo de Historia Natural), el Griffin Museum of Science and Industry o el Adler Planetarium.
Quienes desean hacer estos recorridos y buscan ahorrarse unos dólares de más, Chicago ofrece una alternativa llamada Citypass, un boleto digital con el que los visitantes pueden recorrer varios de los principales atractivos turísticos adquiriendo un paquete y agendando cada uno de los recorridos. Su precio es alrededor de los 139 dólares, unos 612.000 pesos colombianos por persona.
Si prefiere la música y entender por qué los sonidos impactan directamente al cerebro y es lo que nos hace vibrar como humanos, no se puede perder la diversidad cultural que tiene que ofrecer Chicago. Aunque el jazz y el blues no nacieron en la ciudad, se encuentran grandes exponentes que pueden ser deleitados en varios de los lugares de la ciudad mientras pide exquisitos platos o toma un coctel para disfrutar la noche.
En Chicago nació la música house, una expresión de la electrónica que permeó los barrios de la ciudad. Se originó entre los años 70′ s y 80′ s por la comunidad afrodescendiente, convirtiéndose en un movimiento contracultural que poco a poco se fue atribuyendo la ciudad. Hoy, sin duda, el house es una de las grandes exposiciones que tiene la ciudad para mostrar a quienes los visitan.
Tanto así, que uno de los pioneros de este género, Dj Chip E, le dijo a SEMANA que lleva más de 40 años tocando esta música en clubes y fiestas, deleitando a personas y residentes que bailan este género musical.
De hecho, él fue el encargado de amenizar el desfile previo al Thanksgiving arriba del bus de Choose Chicago, la oficina de promoción turística de la ciudad, mientras la gente bailaba alrededor de las calles y veía cada una de las carrozas que desfilaba por sus calles.
El recorrido, que marca el inicio de la Navidad, termina con un espectáculo de fuegos pirotécnicos en el río Chicago, al lado de la Torre Trump. Un show en el que no hay nada más que agradecer por estar presente y vivo en ese momento.
Si desea conocer más sobre la música house y su diversidad, puede visitar varios de los clubes de la ciudad que ofrecen djs locales o invitados extranjeros de este género, que ya ha permeado a distintas partes del mundo.
Richard Gamble, presidente interino y CEO de Choose Chicago, le dijo a SEMANA todo lo que Chicago tiene por ofrecer. “Estoy muy emocionado de invitar personalmente a mis amigos en Colombia a venir a vivir experiencias al estilo Chicago y ver con sus propios ojos por qué es el primer destino global. Estamos orgullosos de haber sido elegidos la primera gran ciudad en Estados Unidos por octavo año consecutivo por los lectores de la revista Condé Nast Traveler”, aseguró.
Gamble agregó que Chicago ofrece opciones para todos y que se pueden encontrar experiencias inolvidables que pasan por la comida, el entretenimiento y la hospitalidad de los locales. “Chicago es la casa de más de 60 museos 250 teatros. Pueden explorar icónicas instituciones como el Instituto de Arte de Chicago o The Field Museum de Historia Natural”, agregó.
Gamble también se refirió a la diversidad musical y cultural que se encuentra en la ciudad como el jazz, el blues, rock, el house, la música clásica, entre otras. “Chicago está preparada para recibirlos”, dijo.
Deportes
Otro de los principales atractivos de Chicago son sus deportes. Tienen equipos que son referentes en todo el país. ¿Qué tal conocer el lugar en donde Michael Jordan hacía sus icónicas cestas? El United Center, es ese lugar. Es allí donde juegan los Chicago Bulls cada cierto tiempo. También encontrará una tienda donde podrá comprar una camiseta de Jordan o de otras figuras actuales del equipo, además de ver fotografías históricas.
Cada cesta de los Bulls es celebrada por los presentes con una gran ovación contagiosa, que acompañada de luces con el característico rojo del equipo, una salchicha en la mano y en la otra una bebida, es el plan predilecto para los amantes de este deporte, y para los que no también.
La infraestructura del United Center es tan impresionante que también es la casa de los Chicago Blackhawks, seguro lo reconocerá no solo por su color rojo -también característico de los Bulls- sino por su logo del rostro de perfil de un indígena, una referencia a al Halcón Negro, un jefe indio de finales del siglo XVIII y principios del XIX que se ha convertido en el símbolo del equipo.
No importa si un día hay partido de los Blackhawks y al siguiente juegan los Bulls, la infraestructura del estadio está capacitada para que un día se vea la pista de hielo y al siguiente haya canastas y balones de baloncesto. Ambos eventos comienzan con el himno de los Estados Unidos, interpretado por artistas locales con un gran tono de voz que hace emocionar a todos los asistentes. El hockey es un deporte tan local que muchos pueden tener dudas de cómo se juega, pero en el lugar se aprende poco a poco y no deja de generar emoción los fuertes choques entre los jugadores mientras patinan con sus palos y pasando un disco sobre el hielo.
En ambos eventos podrá sentir la cultura local de las personas residentes de Chicago, que van a apoyar los equipos de su ciudad con fervor. No hay que preocuparse de la multitud, la organización del lugar es impecable.
Chicago es una ciudad que ofrece gran variedad de planes para todos los gustos. Visitantes de distintos países que ya han venido en otras ocasiones aseguran que siempre encuentran un plan diferente, nuevos lugares por conocer o algo que se acaba de inaugurar.
Aunque el frío puede generar recelo en algunos, lo cierto es que el invierno termina convirtiéndose en un atractivo. Basta con tener una buena chaqueta, bufanda, un gorro, guantes y, si es necesario, ropa térmica, para salir a la ciudad a hacer recorridos. Los sitios y medios de transporte en general cuentan con calefacción y son cómodos. Otra gran época del año para conocer la ciudad, según varios testimonios, puede ser verano, sin embargo, la verdad es que no importa si es otoño o primavera, Chicago ofrece su encanto a lo largo del año y planes de todo tipo dependiendo el clima de la ciudad.
¿Volvería a Chicago? Fue una pregunta que me hice constantemente mientras visitaba las calles y lugares de la ciudad. Y definitivamente regresar es una gran opción para conocer nuevos sitios, vivir nuevas experiencias y volver a encantarse una vez más con sus edificios, comida, deportes, cultura y demás.
Chicago es ese destino que se convierte en una gran opción en los Estados Unidos para encantarse con la organización, los rascacielos, la buena comida y una cultura infinita que enamora a locales y visitantes.
*Este viaje fue realizado gracias a una invitación de Avianca y Choose Chicago.