De acuerdo con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, la biodiversidad que posee Colombia es tan grande que existen varios ecosistemas que las personas pueden disfrutar en diferentes regiones del país, desde arrecifes de coral, manglares, playas, hasta páramos, nevados, desiertos, entre otros.

“Colombia alberga cerca del 10 % de especies de seres vivos conocidas en el planeta y cuenta con 91 ecosistemas, por lo que es considerado uno de los países más biodiversos del mundo”, señala la entidad.

Por esta razón, el turismo de naturaleza es una gran opción para descubrir sus maravillas naturales y su espectacular riqueza mientras, al mismo tiempo, se aprenden buenas prácticas ambientales, sociales y económicas, para fortalecer el cuidado de esta diversidad biológica y contribuir en su conservación.

Entre los atractivos del país que más se destacan están sus ríos de colores, ecosistemas que debería sumar a su lista de planes imperdibles para visitar, ya sea en sus próximas vacaciones o durante un fin de semana, para reconectarse con la naturaleza y descansar de la rutina.

Los tres ríos de colores más lindos e imperdibles de Colombia

Estas aguas de colores son uno de los fenómenos más sorprendentes de la naturaleza que vale la pena visitar en el país. “Estos lugares son además fundamentales para el ecosistema local, al brindar entornos especiales para diversas especies de flora y fauna y nos distinguen de otros destinos, por eso se hace imprescindible la conservación y el respeto hacia su desarrollo sostenible”, explicó Paula Cortés Calle, presidente ejecutiva de Anato.

Caño Cristales

El más popular en la lista es el río Caño Cristales, ubicado en el Parque Nacional Natural Sierra de La Macarena, en el departamento del Meta. Cuenta con más de 100 kilómetros de extensión, conquistando a viajeros de todas partes del mundo por su incomparable encanto con 7 colores.

Este año Caño Cristales cerrará su temporada antes de lo esperado por condiciones climáticas. | Foto: Parques Nacionales Naturales de Colombia

Esta auténtica joya, llamada el río de los Siete Colores, reúne los entornos de la Amazonía, la Orinoquía, los Andes y el Escudo Guayanés. El fenómeno que refleja es efecto de las macarenias clavígeras, plantas acuáticas que habitan en su fondo rocoso, las cuales durante seis meses brindan tonalidades rojas, verdes y rosadas.

Durante el segundo semestre del año, temporada de lluvias, es el mejor momento para viajar a este destino, debido a que el nivel del agua crece y es cuando florece la clavijera.

Caño Cristales es uno de los bienes naturales más preciados no solo de La Macarena, sino del país. | Foto: Getty Images

Trankilandia

Localizado en Guaviare, este río se caracteriza por sus tonalidades verdes, rosado, lila y rojo, que cubren la superficie del balneario, brindando una experiencia inolvidable.

Además, mientras se aprecia su belleza en medio de paisajes frondosos, también se descubren asombrosas cascadas, pozos, piscinas naturales y algas de agua dulce, que lo convierten en un escenario perfecto para soñar y sentir el poder de la naturaleza.

Quebrada Las Gachas

Por último, se encuentra la Quebrada Las Gachas – Guadalupe, a 180 kilómetros de Bucaramanga, Santander, un atractivo turístico de agua cristalina y cráteres de diferentes profundidades, que a diferencia de Caño Cristales, no pierden su color en ninguna temporada del año porque el color del agua no es derivado de sus plantas sino de las rocas de estos jacuzzis naturales.

El balneario Las Gachas, también llamado el "Caño Cristales de Santander", es reconocido por sus aguas rojas y cráteres lunares. Foto: archivo/Semana

“Colombia tiene un sinnúmero de atractivos con pintorescos paisajes, ideales para una conexión única con la tierra y con la cultura local. Siempre recomendamos realizar estas experiencias de la mano de una agencia de viajes, pues allí están los profesionales idóneos para orientar los recorridos y que los turistas no pierdan detalle de estos tesoros de contrastes y colores vibrantes”, afirmó Cortés.