Chile ofrece un sinnúmero de atractivos para los turistas que buscan aventuras en medio de las cordilleras de los Andes y entre las maravillas que se pueden encontrar está Salar de Pedernales, una parada imperdible en un viaje a la Región de Atacama, en Chile.
¿Dónde queda Salar de Pedernales?
El salar de Atacama es el mayor depósito salino de Chile y se encuentra entre ciudades chilenas. La más cercana es San Pedro de Atacama, mientras que la capital regional, Antofagasta, se encuentra más hacia la parte oeste.
El Salar de Pedernales es una gran costra salina de yeso y halita de más de 400 kilómetros cuadrados. En él puede encontrar pequeños oasis de biodiversidad, en donde encontrará especies endémicas y aves emblemáticas como los flamencos, águilas y aguiluchos, a demás de mamíferos como los guanacos, las vicuñas, los pumas y los zorros.
Entre sus mayores atractivos está la Laguna Turquesa, la cual se caracteriza por sus aguas cristalinas que le permitirá tener la sensación de estar flotando.
Esta laguna emerge dentro de un complejo lacustre que aflora en varios pozos diferentes. Parte de la gracia de ir a este lugar es el hecho de poder disfrutar de un recorrido de 1 hora, aproximadamente, haciendo un circuito por las 15 lagunas que lo componen.
Además, el color de las aguas es algo impresionante, pues van pasando por tonos rojizos, azules profundos, verdes opacos, hasta llegar al turquesa, de acuerdo a lo que se registra en el portal Valtours.
La Laguna Turquesa, por su salinidad, da una sensación de volar en medio de la nada y, para algunos, es la oportunidad perfecta para limpiar y renovar energías.
Es un lugar en donde podrá fotos totalmente increíbles con el Volcán Doña Inés de fondo, teniendo así la oportunidad de registrar la magnitud de este territorio y sus imponentes montañas.
El recorrido hasta llegar
El mismo portal en referencia asegura que este es un viaje que va ofreciendo diversos atractivos turísticos. Es así como mientras llega a su destino, puede encontrar desde ruinas de asentamientos mineros de hace unos 100 años, los cuales fueron parte del motor económico del país entero, atravesar cordones montañosos que van dando cuenta de la magnitud de Atacama, y los grandes oasis de la precordillera como lo son Las Vegas, aguadas o bofedales.
El siguiente paso consiste en llegar al altiplano, el cual cuenta con paisajes montañosos de Los Andes, entre los cuales se destaca el Volcán Copiapó o el Nevado de Tres Cruces, con cumbres que superan los 6.000 metros sobre el nivel del mar.
En medio de este recorrido por las montañas de los Andes, podrá observar la belleza del paisaje salino del Altiplano, el Salar de Maricunga.
Al norte de Maricunga a 1 hora aproximadamente, se encontrará con el salar más grande la región de Atacama: Pedernales. Aquí es necesario contar con un vehículo alto y preferentemente 4x4, ya que los atractivos que alberga este sitio son de difícil acceso, por otra parte, lo mejor es contar con un servicio de guía que lo oriente en esta región.
Al regreso de esta experiencia podrá disfrutar de los hermosos atardeceres que ofrece este territorio y si está de suerte, podrá ver algunos de los animales propios de la región que aparecen hacia las horas de la tarde como las vizcachas o los guanacos que se desplazan en busca de sitios seguros para alimentarse y descansar.