Los concesionarios agremiados en Aconautos levantaron, nuevamente, su voz contra de algunas medidas que pretende reglamentar el Gobierno Nacional con la reforma al Decreto Único Reglamentario del Sector Transporte.
Según se pronunciaron desde la agremiación, aunque ven con buenos ojos la intención del Gobierno de negociar y de llegar a un acuerdo que permita reactivar el sector transportador en el país, sí dejaron ver su preocupación por cuenta de algunos aspectos que podrían jugar en contra de los transportadores.
”No dudamos en la loable intención de este Gobierno de acelerar la actividad económica del país y en ajustar las regulaciones a las necesidades actuales, y por eso desde Aconauto apoyamos toda medida que contribuya a la reactivación, así como en mitigar el impacto ambiental y de seguridad vial”, señaló Pedro Nel Quijano, presidente de la Asociación Gremial de Concesionarios de Automotores.
En este sentido, los agremiados consideran que acciones como las de restablecer la tabla de valores de los fletes del transporte de carga logrando un equilibrio rentable entre el transportador y el generador de carga y fortalecer el aparato fiscalizador institucional que la haga respetar y exija su cumplimiento son imprescindibles; sin embargo, consideran que hay acciones regresivas que están contempladas dentro de la reforma al mencionado decreto.
Según explicaron, aunque hay varias problemáticas que afectan al sector, como el costo del combustible, la inseguridad en las carreteras, entre otras, una de las principales es la caída en la oferta de carga, esto, como consecuencia, según Aconauto, de la desaceleración de la economía.
De igual forma, indicaron que el esquema de reposición 1 a 1 “resultó contraproducente porque en su aplicación floreció un círculo vicioso de prácticas ineficientes que impidió el cumplimiento de las metas trazadas por el mismo Gobierno”.
En este sentido, indicaron que la tabla de equivalencias de Peso Bruto Vehicular (PBV) propuesta para la reposición es inexacta y “se presta para carruseles de ineficiencias al impedir el libre acceso al mercado”.
Aconautos fue más allá e indicó que “la reforma del decreto de marras, tal como está prevista en los borradores que circulan, tendrá el efecto contrario a la reactivación de la economía y la sostenibilidad ambiental porque no hay exceso de parque automotor. Por el contrario, Colombia tiene la tasa más baja de motorización de todos los países de la OCDE y en Latinoamérica solamente es mejor que la de Venezuela. Además, cabe anotar que el mayor aporte a la contaminación atribuible a fuentes móviles proviene de vehículos de más de 10 años de uso”.
El gremio indicó que de firmarse las modificaciones planteadas al decreto, además de no lograr una verdadera renovación del parque automotor por ejemplares que le aporten al cuidado del medio ambiente, se presentará un decrecimiento estimado “de 3.500 unidades anuales en el mercado de camiones, lo que implicaría un impacto aproximado de $223.000 millones anuales, ($160.000 millones en recaudo de IVA y $63.000 millones de recaudo de aranceles)”.
“En resumen, no se puede pretender que Colombia sea el Nepal de Suramérica mediante la protección de vehículos obsoletos y contaminantes; por el contrario, el país está en la capacidad de ofrecer a los propietarios un plan de reposición con créditos blandos para la adquisición de equipos nuevos, en los que la economía se reactiva y haya prosperidad para todos”, señaló Quijano.
Para mitigar estos impactos y con el fin de contribuir a la discusión sobre las modificaciones a este decreto, Aconauto también lanzó varias propuestas que espera sean tenidas en cuenta por el Ministerio de Transporte:
- Abolir el esquema de reposición de los equipos de transporte 1 a 1 porque es ineficiente para la renovación del parque automotor, dado que genera una indeseable espiral especulativa a favor de los usados, en vista de que se convierte en objeto de deseo, con el consecuente incremento en los precios, paralización del mercado automotor y dilatación de las matrículas por el necesario cumplimiento de los procesos de desintegración, documentación, etc.
- Fortalecer la sostenibilidad ambiental del sector transportador mediante la renovación del parque automotor con planos atractivos de reposición.
- Restablecer la tabla de valores de los fletes del transporte de carga, buscando un equilibrio de rentabilidad entre el transportador y el generador de carga.
- Fortalecer el aparato fiscalizador institucional que la haga respetar y exija el cumplimiento de la tabla de valores de los fletes.