A la hora de comprar un carro nuevo o usado, hay que contemplar una parte del presupuesto para las revisiones o reparaciones que este vehículo demande.
En el caso de haber adquirido uno cero kilómetros, las visitas al taller son de rutina y se hacen cada cierto número de kilómetros para revisar que todo esté bien, cambiar algunos filtros y reemplazar el aceite de motor, entre otras asistencias mínimas.
Sin embargo, si la opción fue comprar un vehículo de segunda, la necesidad de conocer a ciencia cierta el estado del carro es fundamental para no llevarse sorpresas más adelante y para conocer qué tanto tiempo de vida útil les quedan a ciertas partes fundamentales para su funcionamiento, como el motor, las llantas, la transmisión, etc.
En este orden de ideas, hay que saber que hay daños que afectan totalmente la operación de cualquier carro, sin importar si es nuevo o usado, y cuya reparación es muy alta en términos económicos, por lo que solucionarlas muchas veces termina por arruinar al dueño del vehículo.
Además, es prudente contar con un seguro, conocer los pormenores y tener clara la letra pequeña, pues estas asistencias muchas veces no cubren los gastos por reparaciones, lo que termina por desalentar a quienes piensan usarlo para atender estos daños.
Los daños más caros que puede sufrir un carro
Transmisión
Esta es una parte fundamental de cualquier vehículo a combustión; sus reparaciones varían si se trata de un auto manual o uno automático. Si es la primera opción, cabe la posibilidad de que la visita al taller salga más barata, pues es un tema netamente mecánico que puede llevar menos tiempo.
Si se trata de un carro automático, el daño es uno de los que más asusta a los propietarios, pues no queda más que reemplazar las diferentes partes afectadas o todo el sistema completo, y en ocasiones estos repuestos suelen ser importados, por lo que habría que sumar el costo del envío y también si el taller cobra el parqueadero.
Por último, así sea un daño cubierto por la garantía, los talleres cobras algo por reparar el carro y esta cifra tampoco es económica; en conclusión, una reparación de este tipo puede estar entre los $ 8′000.000 y en ocasiones puede hasta superar los $ 30′000.000.
Reparación de motor
Este es otro de los daños considerables que puede sufrir cualquier carro; en ocasiones puede superar los $ 50′000.000 debido a la calidad del vehículo, la marca y la cantidad de piezas que se necesiten cambiar.
En este punto sucede lo mismo que con la transmisión, pues hay partes que deben ser traídas directamente desde el país donde se producen los vehículos, por lo que importarlas aumenta el valor del arreglo y el tiempo de entrega.
Cabe señalar que, con el paso de los años, la tecnología ha aumentado, por lo que estas piezas no suelen fallar, pero en el momento en el que lo hacen, la mano de obra debe ser especializada y las partes dañadas deben ser reemplazadas por piezas originales y costosas.
Baterías en carros híbridos o eléctricos
Para este tipo de vehículos, las baterías son lo más importante, y sin ellas, no hay forma de que puedan funcionar. En este momento, en el que la tecnología cabalga para encontrar desarrollos que prometan mayores autonomías y una mayor capacidad, un daño en este sistema es casi que catastrófico.
En este sentido, los diferentes fabricantes han ido pasando de grandes paneles a módulos más pequeños que permiten atacar, de forma directa, el lugar donde se presente un daño, lo que evita tener que cambiar todo el sistema de alimentación.
Sin embargo, la mano de obra, el trabajo especializado y la importación de los repuestos no suelen salir tan económicos como se quisiera, por lo que se habla de un trabajo que puede tener como piso los $ 10′000.000 y alcanzar cifras realmente astronómicas.
Suspensión y dirección
Al tratarse de una parte fundamental para el funcionamiento del carro, es indispensable arreglar el daño de inmediato; aquí, la reparación también varía del tipo de carro y las partes que se tengan que reemplazar, pero en general es algo que no sale tan costoso como otras averías.
Como cada carro tiene, según su fabricante cierto tipo de dirección o suspensión, los precios de los repuestos pueden variar y el precio final oscilaría entre un millón de pesos y los 12′000.000, según el fabricante.
Bolsas de aire y otros elementos de seguridad
Este es otro complemento cuya reparación es bastante costosa. Hay acciones o choques que activan las bolsas de aire y que a la hora de la verdad no representaron ningún daño mayor para el auto; sin embargo, al activarse estos dispositivos, hay que reemplazar sus módulos y esos aparatos son bastante costosos.
Los arreglos requieren mano de obra especializada y un trabajo muy detallado, casi tan perfecto como la configuración de fábrica, por lo que quien realice la operación no cobrará menos de $ 4′000.000 y la factura total podría superar los $ 20′000.000, pues hay que configurar, además de estos repuestos, los demás sensores y partes que hacen parte del sistema de seguridad del vehículo afectado.