La seguridad al conducir depende en gran medida del correcto funcionamiento de los frenos del vehículo. Sin embargo, muchas veces se pasan por alto señales de alerta que pueden derivar en costosos daños mecánicos y, lo más grave, en situaciones de peligro en la carretera. Conocer los problemas más comunes que pueden presentar los frenos es clave para actuar a tiempo y evitar accidentes.
Desgaste de las pastillas
Uno de los problemas más habituales en el sistema de frenado es el desgaste de las pastillas. Estas piezas son fundamentales para detener el carro, ya que aplican presión sobre el disco de freno para reducir la velocidad. Con el uso constante, estas se desgastan de manera natural, disminuyendo su capacidad de fricción.
Los signos más claros de desgaste incluyen ruidos chirriantes o metálicos al frenar, así como una distancia de frenado más larga. Ignorar este problema no solo afectará la eficacia de los frenos, sino que podría dañar los discos, lo que incrementará significativamente el costo de reparación.
Fugas en el líquido de frenos
El sistema de frenos de un vehículo utiliza el llamado líquido de frenos para transmitir la presión del pedal a las ruedas. Una fuga en este reduce la presión hidráulica, lo que puede hacer que el sistema pierda eficacia.
Si nota que el pedal se siente más esponjoso de lo habitual o se hunde más de lo normal al pisarlo, es posible que haya una fuga. También es importante estar atentos a las manchas debajo del vehículo. Reparar las fugas del líquido es esencial para mantener un rendimiento óptimo del sistema y evitar que los frenos fallen completamente.
Discos de freno deformados
Con el tiempo y el uso, los discos de freno pueden deformarse debido al calor extremo generado durante el frenado. Esta deformación puede causar vibraciones al pisar el pedal o generar un frenado irregular.
Si bien un disco de freno levemente deformado puede no parecer un problema grave, ignorarlo puede agravar la situación, ya que esto no permite una correcta adherencia de las pastillas, lo que aumenta la distancia de frenado y pone en riesgo la seguridad del conductor. Reemplazarlos es fundamental para un frenado eficiente.
Pedal de freno esponjoso o inestable
Un pedal de freno que se siente esponjoso o que necesita ser presionado repetidamente para funcionar adecuadamente puede ser un indicio de problemas en el sistema hidráulico. Este síntoma suele deberse a la presencia de aire en el sistema o a un bajo nivel de líquido de frenos.
El aire en las líneas de freno puede comprometer la capacidad del sistema para generar suficiente presión, lo que resulta en una respuesta lenta o ineficaz al intentar frenar. La purga del sistema para eliminar el aire o la reposición del líquido solucionarán este problema. Es esencial atender esta falla lo antes posible, ya que compromete la capacidad de detener el vehículo de manera segura.
Desgaste en el cilindro maestro de frenos
El cilindro maestro es una de las piezas más importantes del sistema de frenado. Este componente es responsable de convertir la presión que usted ejerce sobre el pedal en la presión hidráulica necesaria para activar los frenos. Con el tiempo, el cilindro maestro puede sufrir desgaste o fallar, lo que afectará gravemente la capacidad del vehículo para hacer esta acción.
Los síntomas de un cilindro maestro defectuoso incluyen una reducción en la fuerza de frenado y la necesidad de presionar el pedal varias veces para detener el vehículo. Si no se repara a tiempo, el carro podría perder completamente la capacidad de frenar.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.