En medio de los rumores que han surgido por un posible cierre de la planta de Audi en Brusela, Bélgica, donde se fabrica un par de modelos de la firma alemana, aparecieron varias versiones que indicaban un posible acuerdo entre la compañía china de carros eléctricos Nio y los teutones para evitar cesar operaciones en esta parte de Europa.
En un principio, se habló de que una comisión de representantes de la marca asiática visitó la planta de Bruselas con el fin de cerrar un acuerdo que les permitiera producir sus carros en suelo europeo y, de paso, salvar los cerca de 3.000 empleo que están en juego y evitar los aranceles de importación que pesan sobre los carros provenientes del continente asiático.
El movimiento entre ambas compañías estaría motivado por la caída en la demanda de los Audi Q8 e-tron y el Audi Q8 Sportback e-tron, modelos que se producen en la planta en cuestión, y que de su comercialización dependía, en gran parte, la sostenibilidad de esta ensambladora.
Fin a los rumores
En medio de todo este mar de especulaciones, los propios mediadores de la firma Nio salieron a desmentir el posible interés de negociar con Audi y de quedarse con la planta de Bruselas para comenzar a producir sus propios vehículos.
Según trascendió, el vocero de Nio, William Li, indicó que la compañía maneja con cautela cualquier movimiento que tenga que ver con la compra de activos tangibles que no estén relacionados con sus estaciones de intercambio de baterías.
“¿Cómo puede Nio permitirse una fábrica que Audi no puede permitirse? Los rumores carecen de fundamento”, explicó el vocero a medios locales que reseñaron su pronunciamiento.
Esta declaración dejó aún más preocupados a los cerca de 3.000 empleados que operan allí, pues la advertencia del Grupo Volkswagen había sido que, una vez terminara la producción del Audi Q8 e-tron en la planta de Bruselas, dejaría de producir cualquier vehículo en esas instalaciones.
Cabe señalar que el ministro de Economía, Robert Habeck, ha dicho que el Ejecutivo central está dispuesto a hacer lo necesario para “ayudar” al fabricante de automóviles Volkswagen a salir hacia delante y evitar el cierre de plantas en el país.
Esta noticia se da en medio de la intención de algunos estados alemanes de pedir al gobierno de su país la reactivación de los subsidios para la compra de vehículo eléctricos, ayuda que fue tumbada por el ejecutivo alemán.
El estado federado alemán del Sarre ha anunciado, este viernes 20 de septiembre, que presentará una iniciativa en el Bundesrat, la Cámara Alta alemana, para reintroducir las ayudas públicas a la movilidad eléctrica, y Baja Sajonia podría estar también dispuesta a valorar apoyar este proyecto.