La piel es el órgano más grande del cuerpo y el cuidado de esta forma parte de la rutina de muchos. Por ende, elegir un estilo de vida saludable puede ayudar a retrasar el envejecimiento natural y prevenir diversos problemas de la piel, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

La médica Lorea Bagazgoitia plantea en su libro Lo que dice la ciencia sobre el cuidado de la piel que el colágeno es el responsable de la elasticidad y firmeza de la piel. Sin embargo, a medida que el tiempo avanza, a partir de los 25 años el organismo disminuye la producción de colágeno, generando efectos colaterales en la piel, como la disminución del brillo e hidratación natural.

El colágeno no solo se encuentra en cápsulas o suplementos, pues existe un sinfín de alimentos que son ricos en esta proteína, como pescado, huevos, verduras, carnes rojas y frutos secos, al igual que otros que contengan omega-3.

Además de estas ayudas, hay pasos básicos del cuidado de la piel que Avon presenta a manera de tips para que la piel luzca brillante y saludable:

1. Limpieza: esto es necesario para el cuidado de la piel, ya que con esto se eliminan impurezas del rostro y este proceso se debe realizar en las mañanas y en las noches.

2. Humectar la piel: la piel seca arruga las células turgentes de la piel, lo que puede provocar líneas delgadas y arrugas prematuras. No obstante, hay que tener presente que cada tipo de piel tiene una necesidad diferente, sobre todo con el paso de los años.

3. Seguir el orden adecuado de los productos: en general, los productos más ligeros van primero. Por ejemplo, se inicia con la limpieza, después va el tónico, el contorno de ojos, el sérum, la crema hidratante, la protección solar y, por último, el maquillaje.

4. Proteger la piel del sol: limitar el tiempo que se pasa al sol, especialmente al mediodía, y usar siempre ropa protectora, como sombreros de ala ancha, camisas de manga larga y gafas de sol. Se debe elegir un producto para el cuidado de la piel con un factor de protección solar (SPF), pues la American Academy of Dermatology (Academia Estadounidense de Dermatología) recomienda usar un protector solar de amplio espectro con SPF de 30 o más.

5. Tener constancia: no tener constancia es un error, ya que la gran mayoría de las personas, cuando inicia un tratamiento físico, fácil o corporal, quiere ver resultados rápidos y al no obtenerlos abandona el tratamiento y la única forma de ver resultados es siendo constantes.

Así mismo, otros factores importantes para que la piel luzca brillante y saludable son:

- Dormir de manera reparadora: dormir lo suficiente permite estimular la melatonina, la hormona relacionada con el sueño que tiene poder antioxidante y antiinflamatorio. Además, dormir al menos siete horas incrementa la hormona del crecimiento.

- Actividad física y dieta saludable: combinar estos dos aspectos es fundamental para mantener una buena producción de colágeno que contribuya al óptimo funcionamiento del sistema óseo y muscular, entre otros.

- Dieta baja en azúcares y harinas refinadas: comer pan, galletas, caramelos, jugos artificiales, entre otros productos, contribuye al aumento de la glucosa en la sangre y el exceso de azúcar se engancha a algunas proteínas (elastina y colágeno entre ellas). Lo anterior hace que estas proteínas se vuelvan rígidas y las endurece, por un proceso denominado glicación.

- No fumar: aunque se haya fumado durante años o se fume mucho, dejarlo puede mejorar el tono y la textura de la piel, así como prevenir las arrugas y manchas.