El acné, conocido como el temido trastorno de la piel que genera la aparición de puntos blancos, puntos negros o granos en el rostro, es una de las enfermedades que afecta sobre todo a los adolescentes, quienes, en los casos extremos, deben someterse a rigurosos tratamientos para tratar de controlar la aparición de granos en el cutis y con ello, las cicatrices que quedan como consecuencia.

Por ese motivo, quienes sufran de esta afección y deseen tratarla de manera natural, pueden acudir a ciertos remedios caseros que ayudarán a que las laceraciones de la piel se reduzcan y, luego, desaparezcan.

Teniendo en cuenta que el acné ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas, según lo explicado por la entidad estadounidense experta en salud Mayo Clinic, se debe acudir a métodos que contribuyan a que la piel se desinflame y se elimine el exceso de grasa.

La doctora en química por la University College of Dublin, Laura González Islas, en conversación con Vogue, explicó que este compuesto ayuda a eliminar los puntos negros de la piel: para hacerlo solo se deben mezclar 3 cucharadas de bicarbonato con 4 cucharadas de leche hasta que se genere una pasta, la cual se debe aplicar en el rostro por dos minutos, para luego enjuagar con agua fría.

La misma publicación afirma que mezclar dos cucharas de bicarbonato con dos limones y una cucharada de miel será ideal para minimizar las manchas del rostro, ya que los ingredientes contienen propiedades exfoliantes, antibacterianas y restauradoras. La mascarilla se debería aplicar en las noches por 15 minutos y se debe tener precaución, debido a que el limón podría causar más manchas en la piel si entra en contacto con la luz.

No obstante, el uso del bicarbonato no está exento de riesgos. Aunque se reconocen los efectos exfoliantes de este compuesto, publicaciones médicas como Healthline recomiendan evitar totalmente su uso en la piel por tres razones principales: puede eliminar la capa protectora de la piel al alterar el pH y eliminar las bacterias naturales, puede irritar la piel o producir alergias y, si se usa en exceso, podría generar enrojecimiento, sequedad, brotes o ardor.

Por otro lado, el centro dermatológico Bioderma afirma que en caso de que la afección cutánea sea grave o de que se padezca otra afección de la piel, como rosácea, “es esencial acudir al dermatólogo para obtener un tratamiento personalizado. Si es un acné leve, se pueden seguir una serie de recomendaciones y remedios caseros, aunque lo más importante es adoptar una rutina facial de higiene’'.

¿Cómo evitar el acné?

Teniendo en cuenta los motivos por el que se produce esta afección, para evitar padecerla, es indispensable seguir algunos de los pasos recomendados por la farmacéutica madrileña Acofarma, entre los que están:

* Utilizar un tónico calmante aplicado con un disco de algodón en la zona que queda cubierta puede evitar la aparición de granitos.

* También usar productos protectores, como una vaselina o un stick antirozaduras puede ayudar a evitar los problemas provocados por la fricción o el roce, como la sequedad o la rojez.

* Lavar la cara con un limpiador facial suave por el día y por la noche para evitar que la sudoración y la falta de transpiración favorezcan la aparición de granos.

* Aplicar una crema hidratante unos 30 minutos antes de ponerse el tapabocas, ya que la hidratación es fundamental para la elasticidad de la piel y para evitar que aparezcan problemas cutáneos como el acné.

* Reducir el uso de maquillaje

* Las personas que ya tienen acné deben aumentar el cuidado de la piel, exfoliando una vez a la semana para eliminar impurezas y utilizando productos con ácido salicílico.