La miel de abejas es uno de los alimentos más valorados en el mundo debido a su alto contenido de nutrientes esenciales y sus propiedades medicinales.

Desde hace millones de años ha sido usada tanto en la gastronomía como para aliviar todo tipo de afecciones, también para cuidar la piel, convirtiéndose en una gran aliada de la belleza. La miel es un alimento fabricado por las abejas a partir de la transformación del néctar de las flores y secreciones de partes vivas de las plantas. Es un producto 100 % orgánico, ideal para cuidar la salud de las personas.

Se le atribuyen propiedades antibióticas, siendo un buen antiséptico para las lesiones de la piel. De igual forma, su consumo aumenta la capacidad de resistencia del organismo a las infecciones, convirtiéndose en un cicatrizante y regenerador de las células de tejidos lesionados por quemaduras diversas, heridas y úlceras, precisa un artículo publicado en la revista Forbes, de México.

Adicionalmente, concentra una importante cantidad de elementos antioxidantes, entre ellos: flavonoides, fenoles, enzimas y ácidos orgánicos similares. Según la revista colombiana Abejas en la Agricultura, las investigaciones científicas muestran que esta mezcla de elementos es la que genera los antioxidantes, que son capaces de reducir el riesgo de ataques al corazón, embolias e incluso algunos tipos de cáncer.

Los estudios también concluyen que es una fuente importante de enzimas y azúcares naturales. Además, se le atribuyen sustancias antisépticas, antiinflamatorias y laxantes que permiten prevenir y combatir varias afecciones que aquejan la salud.

La miel es utilizada de diversas formas para obtener sus beneficios para el organismo y una de las que ha tomado fuerza es los últimos tiempos es su mezcla con agua tibia.

Dentro de los beneficios que ofrece este remedio casero es que tiene efectos diuréticos y antibacterianos por lo que ayuda a limpiar las vías urinarias y reduce el riesgo de padecer infecciones como la cistitis. Gracias a sus vitaminas y minerales, sirve para aumentar la presencia de anticuerpos y evitar el ataque de los virus.

Información del portal Cocina Fácil, de México, indica que si una persona sufre de retención de líquidos, el agua con miel puede ayudar a disminuir los problemas renales. En este caso, lo recomendable es tomarla antes de ir a dormir.

Aliada de la digestión

La mencionada bebida es ideal para ayudar en el proceso digestivo. Las enzimas que contiene la miel mejoran la función hepática y contribuyen a conseguir una buena digestión de los alimentos. Según Mejor con Salud, su ingesta protege la flora bacteriana y facilita la absorción de nutrientes, por lo que el cuerpo puede sacar un mejor provecho de las comidas. De igual forma, tiene un ligero efecto laxante que regula el movimiento intestinal para evitar el estreñimiento.

Otra de las bondades que tendría esta bebida es que ayuda a bajar de peso o mantenerse en uno saludable, gracias a que la miel contiene azúcares naturales que proporcionan una fuente saludable de energía, la cual frena la ansiedad y aumenta el gasto calórico.

También los nutrientes que contiene este alimento pueden fortalecer el sistema inmune. Contiene enzimas, vitaminas y minerales que aumentan la capacidad del organismo para luchar contra varios tipos de patógenos dañinos.

Desintoxica el organismo

Si a la miel con agua se le agrega un poco de jugo de limón se obtendrá como resultado una bebida desintoxicante y digestiva. Mejor con Salud indica que los individuos que ingieren esta bebida una vez al día pueden disminuir hasta un 10 % sus niveles de colesterol con el tiempo. Gracias a esto, se cree que a largo plazo disminuye los problemas del sistema circulatorio y las enfermedades cardiovasculares.

Preparación

Para preparar esta bebida solo se requiere de una cucharadita de miel y un vaso de agua tibia. Se diluye la miel en el agua y se toma en ayunas. Lo ideal es repetir su consumo por lo menos tres veces a la semana para obtener el beneficio de sus propiedades.