Entre la variedad de los remedios caseros, hay uno poco conocido pero con grandes beneficios a la hora de hablar de la salud digestiva. Para este, tan solo se necesita agua para limpiar por completo el intestino de heces acumuladas.

La técnica en cuestión se llama Shank Praksharana. Es simple y no solo limpia a fondo el colon, sino que también elimina por completo los sedimentos del tracto digestivo. Esto supera los resultados de otras técnicas como la hidroterapia colónica y los enemas.

Para conocer más sobre esta técnica, el portal especializado en salud Cuerpo Mente señala que algunas personas se preguntan cómo eliminar las heces y los gases de los intestinos. El método consiste en una yoga de limpieza de colon. la cual consiste en beber agua y, a través de algunos ejercicios simples, mover el agua hacia los intestinos y sacarla por el ano.

Las posturas de yoga inversas (como Sirsasana y Sarvangasana) liberan energía y estasis sanguínea en todo el sistema digestivo, creando una sensación de bienestar. La técnica no solo limpia a fondo el colon, sino que también elimina por completo los sedimentos del tracto digestivo.

Esta técnica ayuda a las personas que tienen problemas digestivos. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Las únicas contraindicaciones son si la persona tiene una úlcera gastroduodenal activa u otra enfermedad aguda de la mucosa gastrointestinal, o si tiene colon rojo, diarrea, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa u otra enfermedad grave. El mejor momento para hacerlo es por la mañana con el estómago vacío y se tarda poco más de una hora, por lo que las hacerlo en vacaciones es ideal.

Con respecto a la preparación, los expertos señalan que hay que calentar el agua y agregarle una cucharada de sal a cada vaso. Se requiere beber un vaso de agua salada caliente y luego se toma otro vaso para ir repitiendo la secuencia de alternancia. De esta forma, el agua llega al intestino delgado sin causar saciedad.

Después de seis o siete tazas, la persona tendrá ganas de defecar. Las heces son normales al principio, pero luego se ablandan hasta volverse líquidas y amarillentas. Con la primera visita al baño, se debe beber otro vaso de agua salada caliente, realizar la acción y evacuar de nuevo. Dependiendo del grado de contaminación intestinal, pueden ser necesarios de diez a 15 vasos de agua. Acto seguido, se hacen los ejercicios de yoga para complementar.

El agua caliente se complementa con ejercicios de yoga. | Foto: Getty Images

La posición inicial es con los pies separados 30 cm. Los dedos deben estar entrelazados, las palmas hacia arriba y la espalda recta. Luego, sin mirar hacia el pecho, hay que inclinarse primero hacia la izquierda y luego hacia la derecha. La repetición de este doble movimiento cuatro veces abrirá el píloro, lo que permite que un poco de agua del estómago fluya hacia el intestino delgado con cada inclinación.

Acto seguido, se extiende el brazo derecho horizontalmente para luego doblar el brazo izquierdo hasta que el pulgar y el índice izquierdos toquen la clavícula derecha. El brazo extendido se gira hacia atrás, girando el tronco, tratando de llegar lo más lejos posible, siguiendo el movimiento con la vista y girando la cabeza.

Siguiendo a juicio la técnica, la eliminación de heces será beneficiosa. | Foto: Getty Images

Sin detenerse y con cuidado, hay que regresar la posición inicial y moverse al otro lado. Este doble movimiento se repite cuatro veces. Posteriormente, la persona debe sentarse en una posición de flexión y arquear la espalda tanto como sea posible. Solo los dedos de los pies y las palmas tocan el suelo. La distancia entre las piernas es de unos 30 centímetros aproximados.

En esa posición, se giran la cabeza, hombros y torso hasta ver el talón opuesto. Sin parar, se retorna a la posición inicial y el proceso se repite del otro lado. Esta frase se repite cuatro veces. El resultado es que los ejercicios permiten que el agua fluya directamente hasta el colon.