El jengibre es una planta de la familia de las zingiberácea; esta mata llega a tener 90 centímetros de altura con largas hojas de 20 centímetros. Este ingrediente se caracteriza por su aroma y sabor picante. Además, posee propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y contiene compuestos terapéuticos cómo el gingerol, el shogaol, el paradol y la zingerona que son los responsables de la gran cantidad de sus beneficios.
Este ingrediente cuenta con más de 21 antioxidantes que ayudan a impedir la peroxidación lipídica. Este alimento hace posible que el hígado sintetice el colesterol malo proveniente de alimentos procesados. Los antioxidantes ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, por lo tanto el jengibre es una opción ideal para ayudar a reducir el colesterol y los triglicéridos.
Un estudio publicado en la Nutrition Journal destacó los agentes antiinflamatorios que posee el extracto de este ingrediente. Otro estudio, citado por el portal web de salud Healthline, asegura que cuando se consume jengibre en ayunas este puede ayudar a tratar los problemas de salud causados por la diabetes crónica.
Esta evidencia fue comprobada en un estudio de la Universidad de Ciencias Médicas que recalcó la importancia de consumir el extracto de jengibre, especialmente en personas que padecen diabetes. El estudio reveló que algunas personas con esta enfermedad pueden regular sus niveles de glucosa en la sangre y destacó la mejora en la sensibilidad de la insulina en el cuerpo.
El jengibre también es usado para aliviar la indigestión, los vómitos y las náuseas. Cuando se acompaña con una dieta saludable y actividad física frecuente, el jengibre puede ayudar a bajar de peso gracias a sus propiedades saciantes. Por otro lado, la Universidad de Ciencias Médicas presentó un estudio sobre los efectos del jengibre, el cual demostró que el extracto de esta raíz también regula la obesidad en el ser humano.
“El jengibre contiene más de 400 compuestos distintos, entre los que destacan los carbohidratos, los lípidos y los compuestos fenólicos”, señala el portal Eldiarioes. Esta planta también posee “aminoácidos, fibra, proteínas, fitoesteroles, vitaminas y minerales, así como la presencia de constituyentes aromáticos”.
El sitio web Deahora señala que es mejor consumir el jengibre fresco que seco, pues “el compuesto bioactivo, el gingerdiol (similar al de los pimientos picantes, la capsaicina), es el más abundante en el jengibre en su forma fresca”. El citado portal añade que no se ha demostrado que este compuesto se vea afectado por el calor de la cocción, pero es más recomendado “usarlo fresco para obtener más beneficios”.
¿Cómo hacer agua de jengibre?
Cabe mencionar que antes de consumir esta bebida se recomienda consultar con un médico especialista que apruebe sus usos.
Ingredientes:
- 4 tazas de agua.
- 1/2 cucharadita de jengibre rallado.
Preparación:
- Lavar la parte de la raíz del jengibre que se va a usar.
- Rallar el jengibre hasta obtener 1/2 cucharadita de jengibre.
- Hervir 4 tazas de agua.
- Agregar el jengibre una vez que el agua esté hirviendo.
- Retirar el agua del fuego y dejar reposar el jengibre en el agua durante 10 minutos.
- Colar los trozos de jengibre y desecharlos.
- Beber el agua de jengibre caliente o fría.
- Se le puede agregar una cucharadita de miel o zumo de limón (opcional).