El colesterol es una sustancia cerosa, similar a la grasa, que el cuerpo necesita para funcionar correctamente. Sin embargo, para no comprometer la buena salud, es importante mantenerlo en las cantidades adecuadas.

En tal virtud, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) precisas que los niveles poco saludables de colesterol pueden dar lugar a múltiples enfermedades cardiovasculares. Por esta razón, es recomendable seguir hábitos de vida saludable, priorizando la alimentación balanceada y la actividad física regular.

Por su parte, según reseña la enciclopedia médica MedlinePlus, el azúcar en la sangre -también llamada glucosa- proviene de los alimentos consumidos a los largo del día y es la principal fuente de energía del organismo.

Tanto lo niveles altos de colesterol y glucosa en la sangre, así como los niveles bajos pueden resultar perjudiciales para la salud. En esa línea, es conveniente realizarse chequeos con frecuencia para tener un monitoreo claro y, en caso de ser necesario, iniciar el tratamiento pertinente.

Una investigación titulada “Los efectos del jengibre en el azúcar en sangre en ayunas, hemoglobina A1c, apolipoproteína B, apolipoproteína A-I y malondialdehído en pacientes diabéticos tipo 2″, publicada en la revista científica Iranian Journal of Pharmaceutical Research, encontró que el jengibre podría ayudar a mejorar los niveles de azúcar en la sangre en ayunas en las personas que padecen diabetes.

No obstante, se requiere mayor investigación al respecto, por lo que el consumo de jengibre para este fin debe ser avalado por un profesional de la salud.

Frente al colesterol, el riesgo está en que los niveles poco saludables de esta sustancia pueden derivar en múltiples problemas para el organismo. Básicamente, se encarga de transportar lipoproteínas, partículas compuestas por proteínas y grasas.

  • Lipoproteína de baja densidad (LDL), también denominada colesterol “malo”.
  • Lipoproteína de alta densidad (HDL), también denominada colesterol “bueno”.

Cuando el colesterol LDL -o malo- adquiere niveles altos deriva en la acumulación de placa en los vasos sanguíneos. En consecuencia, se genera una especie de taponamiento de grasa que, a su vez, aumenta el riesgo de sufrir un ataque al corazón, derrame cerebral u otras complicaciones de salud.

Por su parte, los niveles altos de colesterol HDL -o bueno- pueden reducir el riesgo de sufrir problemas de salud. “El colesterol HDL transporta el colesterol y la placa acumulada en las arterias hasta el hígado, para que pueda ser eliminado del organismo”, anota el NIH.

El jengibre también podría ayudar a regular el colesterol. Según encontró un estudio titulado “Efecto de dos variedades de jengibre sobre la actividad de la arginasa en ratas hipercolesterolémicas”, publicado en Journal of Acupuncture and Meridian, el jengibre redujo los marcadores de enfermedades cardíacas, incluyendo los niveles altos de colesterol malo y triglicéridos.

No obstante, el estudio fue hecho en animales, por lo que el efecto del jengibre en los niveles de colesterol de los seres humanos todavía requiere mayor investigación. Si bien los remedios caseros suelen tener bastante popularidad, es conveniente consultar con un médico antes de intentar con cualquiera de ellos.

Los niveles elevados de colesterol malo pueden ocasionar problemas cardiovasculares. | Foto: Getty Images

¿Cómo preparar infusión de jengibre?

Ingredientes:

  • Cuatro tazas de agua (1 litro)
  • Cuatro cucharadas de jengibre picado o en rodajas (40 g)

Preparación:

  • En primer lugar, de debe poner a hervir el agua. Una vez alcance su punto de ebullición, se incorpora el jengibre.
  • Dejar al fuego durante otros 10 minutos para que el jengibre libere todas sus propiedades. Pasado el tiempo sugerido, retirar del fuego y dejar reposar por otros 15 minutos.
  • Colar la infusión.
  • Una vez esté lista la bebida, se puede consumir caliente o fría.
  • En caso de que el sabor sea demasiado amargo, puede endulzarse con un toque de miel o estevia.