Uno de los mejores aliados para mantener un buen estado de salud es la alimentación, sobre todo a través de ciertos alimentos que contribuyen, por ejemplo, a regular los niveles de azúcar en el cuerpo, brindar nutrientes y a mejorar la memoria, una de las funciones cerebrales más importantes.

Uno de los productos que cumplen las anteriores funciones es el ajo, un ingrediente de sabor potente que es usado por millones de personas en la cocina y que está lleno de nutrientes favorables para la salud.

Aunque el consumo de este alimento no garantiza que las personas no se enfermen o que su estado de salud sea perfecto, los expertos recomiendan incluirlo en la dieta para aprovechar sus beneficios.

De acuerdo con el portal especializado en salud Tua Saúde, entre las bondades del ajo están ayudar contra los virus, bacterias y hongos; combatir el cáncer de colon; proteger el corazón y prevenir los problemas respiratorios.

En cuanto a la calabaza, posee un bajo aporte en calorías y grasas, de acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición (FEN) y es utilizada para preparar sopas, pasteles, croquetas, entre otras.

Adicionalmente, esta hortaliza contiene calcio, magnesio, vitamina A, C, E y betacaroteno. De hecho, la fundación asegura que se caracteriza por “su carácter digerible, pues entre sus componentes predomina el agua y carece de grasas y glúcidos”.

En consecuencia, la calabaza tiene varias propiedades y, de acuerdo con la revista sobre nutrición Cuerpomente, es ideal para proteger el sistema inmune por su contenido de vitamina C.

También al tener una gran cantidad de agua es diurética, lo cual resulta beneficioso para la eliminación de toxinas que ayudan a prevenir los cálculos renales, y funciona para evitar la insuficiencia renal.

La combinación de estos dos alimentos (el ajo y la calabaza) es un gran remedio casero para bajar los índices del colesterol malo. De este modo, el cuerpo podrá digerir correctamente los alimentos y producirá las vitaminas u hormonas necesarias.

Cuando hay exceso de colesterol en el organismo, se puede causar una placa de lípidos que impiden el paso continuo de sangre rica en oxígeno. Lo anterior se conoce como arteriosclerosis, una enfermedad que, si empeora, podría ser necesario tratarla con cirugía.

Una de las formas de juntar el ajo con la calabaza es a través de un puré. El portal especializado Soy Aire explicó su realización:

Ingredientes: 650 ml de agua, 800 gr de calabaza, tres dientes de ajo y sal al gusto.

Preparación:

1. Agregar la calabaza con piel y en trozos en una olla a fuego lento.

2. Agregar el agua hasta que cubra toda la calabaza.

3. Dejar que hierva y colocar un poco de sal en el agua. Revolver.

4. Sacar del agua una vez se sienta blanda.

5. Quitar la cáscara y triturarla hasta obtener un puré sin grumos y espeso.

6. Cortar los dientes de ajo en trozos pequeños e incorporarlos al puré.

7. Mezclar y consumir.

Cabe resaltar que esta receta no reemplaza el tratamiento médico, por lo que es necesario acudir a un especialista si se presentan alteraciones en la salud. Así, no se verán afectadas enfermedades preexistentes que puedan agravarse con estos alimentos.

Es importante, también, tener un estilo de vida saludable que involucre la actividad física diaria.