La presión arterial es una medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre al cuerpo, mientras que la hipertensión es el término que se utiliza para describir la presión arterial alta, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Por tal razón, las lecturas de la presión arterial generalmente se dan como dos números. El número superior se denomina presión arterial sistólica. El número inferior se llama presión arterial diastólica. Por ejemplo, 120 sobre 80 (escrito como 120/80 mm Hg).

  • Una presión arterial normal es cuando la presión arterial es menor a 120/80 mm Hg la mayoría de las veces.
  • Una presión arterial alta (hipertensión) es cuando uno o ambos números de la presión arterial son mayores de 130/80 mm Hg la mayoría de las veces.
  • Si el valor del número superior de su presión arterial es entre 120 y 130 mm Hg y el valor del número inferior es menor a 80 mm Hg, se denomina presión arterial elevada.
Hipertensión | Foto: Getty Images

Por tal razón, el portal Salud 180 reveló que las alcaparras son ideales para para bajar la presión arterial alta, ya que 100 gramos de este alimento contiene 4,9 gramos de carbohidratos, 3,2 gramos de fibra, 2,36 gramos de proteína, 2.348 miligramos de sodio, y 83,85 gramos de agua. Además, tiene Vitamina C (4,3 mg), Vitamina K (24,6 µg) o Vitamina A (138 mg).

Asimismo, el portal alimentos.org indicó que los especialistas recomiendan este alimento para prevenir enfermedades cardiovasculares por su bajo contenido de grasas, lo cual es ideal para las personas que tienen problemas de hipertensión. De igual manera, tienen quercetina y el kaempferol, dos flavonoides que ayudan a controlar la presión.

Por su parte, Mayo Clinic, una entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, reveló que otras maneraspara controlar la presión arterial alta son teniendo cambios en el estilo de vida, como:

1. Reducir el exceso de peso y cuidar la cintura: bajar de peso es uno de los cambios en el estilo de vida más eficaces para controlar la presión arterial.

2. Hacer ejercicio regularmente: la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar mínimo treinta minutos de caminata moderada. Lo vital es que tenga un gasto energético.

3. Llevar una dieta saludable: la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios. Por tal razón, es importante consultar a un experto para que lo guíe.

4. Reducir el consumo de sodio: el efecto del consumo de sodio en la presión arterial varía entre un grupo de personas y otro.

5. Limitar la cantidad de alcohol que se consume, ya que esto puede reducir la eficacia de los medicamentos para la presión arterial.

6. Dejar de fumar, pues al eliminar este hábito se puede reducir el riesgo de una enfermedad cardíaca y mejorar la salud en general.

7. Reducir el consumo de cafeína: es posible que las personas que beben café con regularidad presenten un efecto leve o nulo en la presión arterial.

8. Reducir el estrés: este factor puede contribuir a una presión arterial alta si la reacción al estrés es consumir alimentos poco saludables, beber alcohol o fumar.

De todos modos, antes de consumir algún medicamento o iniciar un tratamiento lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todos.