Los alimentos anticancerígenos son aquellos que pueden ayudar a la prevención de algunos tipos de cáncer. Cabe resaltar que esto solo es una medida preventiva y no es curativa como tal, lo cual quiere decir que aunque sí esté demostrado científicamente que algunos componentes de los los alimentos pueden ayudar a prevenir la aparición de ciertos tipos de cáncer, como el de colon o mama, ninguno se absuelve de contraerlos.
Según el doctor Miguel Ángel Martínez González, epidemiólogo del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, en su libro ¿Qué comes? Ciencia y conciencia para resistir, afirma que existen estudios científicos que comprueban que alimentos específicos pueden ayudar a prevenir la aparición de algunos tipos de cáncer. Esto se debe, gracias a las propiedades de ciertos ingredientes que tienen el rol de proteger las células, potenciar de manera significativa el efecto de los tratamientos y que, por consiguiente, llevan a las personas a tener un estilo de vida más saludable. Todo esto contribuye a que el organismo esté más fuerte y sano.
Por otro lado, Paula Jiménez-Fonseca, oncóloga médica del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), afirma que el 40 % de los que sufren cáncer es por causas ambientales y sólo entre el 5 o 10 % son claramente hereditarios. Además, confirma que la dieta está muy ligada con el 9 % de los tumores, mientras que un 5 %, están vinculados a consecuencias de la obesidad. Sin embargo, la alimentación en general está asociada con más del 35 % de todos los casos de cáncer que se producen.
Por lo anterior, se puede deducir que los alimentos anticancerígenos son todos los que protegen las células, tienen propiedades de fortalecer al sistema inmune y regulan los niveles de azúcar en la sangre. Por esta razón, se debe aumentar la diversidad de ingredientes y nutrientes que el cuerpo ingiere, además de proporcionarle vitaminas y minerales que ayuden a defenderse y fortalecerse mejor. Aquí algunos alimentos que ayudan a prevenir el cáncer:
Arándanos y frutos rojos
Los frutos rojos, en especial los arándanos, tienen propiedades anticancerígenas, ya que inactivan los puntos en los que los carcinógenos se unen al ADN, como consecuencia de la presencia de quercetina, un pigmento vegetal que se asocia con actividad antitumoral.
Ajo
En estudios de laboratorio, el ajo ha demostrado tener beneficios de salud en cuanto al sistema cardiovascular. Además, es considerado como el alimento que puede lograr eliminar radicales libres, los cuales causan daño celular. También ayuda a mejorar la protección de las células contra el daño oxidativo.
Espinaca
La espinaca es considerada anticancerígena, ya que contiene hierro y clorofila, un descontaminante que saca del cuerpo tanto los derivados del plástico como los metales pesados. Mientras menos se cocine, mejor.
Cúrcuma
La cúrcuma se ha estudiado como un alimento anticancerígeno por su gran efecto protector en tumores relacionados con páncreas y colon.
Aceite de oliva
Uno de los antioxidantes más importantes en la dieta es el aceite de oliva. Su ingesta aporta propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, que ayudan a prevenir el cáncer.
Salmón y pescados azules
El salmón y otros pescados azules como las sardinas y las truchas contienen vitamina D, ácidos grasos y selenio, lo cual ayudan a reducir los niveles del colesterol. Además, inhiben a los radicales libres y disminuyen la proliferación celular.
Té verde
Es conocido por sus propiedades antioxidantes y actúa como protector contra los efectos de la radiación.
Cabe mencionar que, luego de conocer los beneficios de estos alimentos anticancerígenos, debe existir constancia y balance. Esto quiere decir que si una persona no tiene determinado nutriente o vitamina en su cuerpo, debe procurar consumir alimentos que contengan esos faltantes todos los días. Sin embargo, lo más importante es consumir verduras, frutas, proteínas y fibras para mantener una dieta balanceada.