Los labios son una parte muy delicada de la cara, que, por lo general, suelen sufrir algunos efectos del frío, viento y resequedad ambiental. Cuando esto sucede, los labios se pueden agrietar con frecuencia e incluso se pueden general lesiones que muchas veces son difícil de tratar.

Para comprender la anatomía de los labios, la revista especializada Mejor con Salud detalla que una investigación de la revista Medicina Legal de Costa Rica, explica que estos están cubiertos por una capa muy fina de estrato córneo, no tienen glándulas sebáceas y no contienen mucha melatonina. Esto quiere decir que están casi desnudos y por ende, muy expuestos.

Lo anterior hace que se produzcan algunos problemas estéticos y de salud, entre ellos, arrugas, resequedad, agrietamiento, decoloración de los labios y decoloración del contorno de los labios. Por otra parte, uno de los problemas más comunes cuando no se cuidan correctamente los labios es el herpes labial, según indica un estudio de la Asociación Española de Pediatría. Esta afección suele aparecer y reaparecer por el debilitamiento del sistema inmunitario.

Para prevenir esto y mantener unos labios saludables e hidratados, la alimentación es un factor esencial para su cuidado. Por ello, Mejor con Salud, explica que el consumo de algunas vitaminas como la A, B y C hacen lucir unos labios fuertes, saludables y libres de resequedad.

Sobre esto, un estudio realizado en la Universidad Complutense de Madrid señala que el consumo moderado de vitamina E aporta beneficios a los labios. Esta también ayuda a prevenir la aparición de herpes y también a que reaparezcan, ya que el organismo aprovecha esta vitamina para mantener fuerte el sistema inmunitario y así evadir virus y bacterias.

  • Alimentos ricos en vitamina A: los expertos en salud aconsejan incluir a la dieta alimenticia alimentos como el pescado, huevos, lácteos, verduras y frutas como el mango.
  • Alimentos ricos en vitamina E: gracias a su poder antioxidante, este tipo de a alimentos favorecen la curación de lesiones cutáneas, especialmente en los labios. Por lo anterior, se aconseja consumir nueces, semillas y verduras de hoja verde.

Adicional a estos alimentos, es fundamental consumir abundante agua para una correcta hidratación de la piel y los labios. Normalmente, cuando los labios se resecan, esto puede indicar un signo de deshidratación o falta de líquidos en el organismo, por lo que es importante una hidratación constante.

Cuidados diarios para mantener unos labios sanos

Por su parte, el portal especializado Horgarmania listó una serie de técnicas con las que es posible cumplir este objetivo sin necesidad de recurrir a tratamientos químicos.

  • Exfoliar los labios: unos labios sin imperfecciones requieren de exfoliaciones para retirar las células muertas que se puedan acumular. Es posible realizarla mezclando miel y café. Aplicar dicha mezcla en los labios haciendo movimientos circulares y retirar el producto con agua tibia. Se aconseja exfoliar una vez a la semana.
  • Utilizar engrosadores: estos productos deben ser autorizados por un experto. Existen de dos tipos, aquellos que proporcionan volumen durante unas horas, y otros que se aplican todos los días para que el efecto sea más duradero.
  • Maquillaje: es una de los más utilizadas para dar la ilusión de voluminosidad en los labios. La clave está en aplicar corrector en las comisuras de la boca y alrededor, con un lápiz de color natural, perfilar el contorno de la boca, rellenar el interior de los labios con labial que no sea mate y aplicar un poco de brillo en el centro.