La alergia es una respuesta inflamatoria desencadenada del sistema inmunitario entre otras sustancias, por la histamina, la cual es responsable de los principales síntomas (picor de ojos). Además, se produce cuando un alérgeno supera las primeras barreras defensivas del organismo, las mucosas y la piel.
En la alergia ocurre una “reacción equivocada” frente a “cosas”, alérgenos, con las que se está en contacto de forma habitual como las plantas, el polvo, los alimentos, los fármacos o los animales y que no tendrían por qué alterar el sistema inmunológico. Se producen así reacciones inflamatorias que originan los síntomas típicos de la alergia, según el portal Quiron Salud.
Por otro lado, Mayo Clinic, señala que el sistema inmunitario produce sustancias conocidas como anticuerpos. Cuando las personas sufren de alergias, el sistema inmunitario produce anticuerpos que identifican a un alérgeno en particular como dañino, incluso si no lo es. Luego, cuando entran en contacto con el alérgeno, la reacción del sistema inmunitario puede hacer que los senos paranasales, la piel, el aparato digestivo y las vías respiratorias se inflamen.
Algunas personas tienen reacciones similares a las alergias frente a las temperaturas cálidas o frías, la luz del sol y otros desencadenantes ambientales, según Medline Plus. Además, en algunos casos se debe a la fricción (un roce o un golpe fuerte en la piel), la cual producirá síntomas.
Sin duda, la alimentación juega un papel fundamental en la salud de los humanos, por eso se deben cuidar las mucosas, la microbiota, y la pared intestinal para que el intestino pueda ejercer correctamente sus funciones: actuar como barrera frente a patógenos, absorber nutrientes, y generar sustancias beneficiosas. Además, se debe favorecer la función hepática.
Para prevenir las alergias, lo mejor que se puede hacer es consentir el sistema digestivo, ya que en él reside el 70 % del sistema inmunitario. También es importante ayudar al hígado en los meses previos a la aparición de las alergias.
Sin embargo, hay alimentos que perjudican el cuerpo, en especial alimentos irritantes como el gluten, los lácteos, el azúcar y el café, ya que dañan la integridad de la pared intestinal, saturan el hígado y facilitan la acumulación de toxinas.
Aquí, algunos alimentos que resultan especialmente beneficiosos para combatir las alergias:
Té verde
- El té verde contiene galato de epigalocatequina (EGCG), que neutraliza un receptor implicado en la producción de la respuesta alérgica.
- Además, el té verde es rico en antioxidantes con acción antiinflamatoria.
- Beber una taza al día, fuera de las principales comidas.
Zanahoria
- Todos los alimentos ricos en betacarotenos y vitamina A tienen una función protectora del sistema inmunitario, que es mayor si se aliñan con una grasa saludable.
- Beber en días alternos, siempre ligeramente cocinada.
Manzana
- Esta fruta es rica en quercetina, un flavonoide que tonifica el sistema inmunitario y ayuda a minimizar la respuesta alérgica.
- Toma al menos una al día, cruda o cocida.
Cebolla cruda
- La cebolla aporta aminoácidos azufrados necesarios para la función hepática.
- Además, este bulbo también es rico en quercetina, el antioxidante con acción antihistamínica.
- Toma una al día, cruda y macerada o bien cocinada.
Col cruda
- Generalmente, todos los vegetales de la familia de las coles son ricos en glutamina, un aminoácido que ayuda a cicatrizar la pared intestinal cuando hay hiperpermeabilidad y favorece así las funciones del sistema digestivo.
- La col cruda es rica en vitamina C, necesaria para la función hepática y para tonificar el sistema digestivo.
- Se puede consumir cuatro veces por semana, en zumo, al vapor o hervida.
Semillas de lino
- Las semillas de chía o las de cáñamo son imprescindibles para prevenir y mejorar las alergias por ser fuente de omega-3, un potente antiinflamatorio.
- Añadir 1 o 2 cucharadas al día, mejor trituradas, a yogures, granolas, batidos y arroces.
Ajo
- Fortalece el sistema inmunitario.
- Cuando se toma crudo y machacado, aporta sustancias que inhiben la acción de ciertas enzimas inflamatorias que pueden provocar reacciones alérgicas.
- Tomar 2 dientes de ajo al día. Es mejor que el ajo esté crudo y machacado.
Cúrcuma y jengibre
- La curcumina de la cúrcuma es antiinflamatoria y antioxidante.
- Mientras que el jengibre mejora la digestión, desinflama y ayuda a las defensas.
- Incluye 2 rodajas de cada uno al día en infusiones, salsas u otras recetas.