Los riñones tienen un papel fundamental para el buen funcionamiento del organismo, ya que son los encargados de filtrar los desechos del cuerpo. Estos órganos, que están ubicados a ambos lados de la columna, realizan una filtración de más de 200 litros de sangre y dos litros de productos de desecho antes de que se eliminen del cuerpo a través de la orina.

Cabe resaltar que los riñones sanos son fundamentales para una correcta desintoxicación. Sin embargo, ciertos alimentos pueden incentivar la aparición de cálculos renales y así evitar que estos órganos funcionen bien.

En contexto, los cálculos renales ocurren cuando hay demasiado ácido en la orina. “Estas piedras contienen ácido úrico, una sustancia que el cuerpo produce cuando descompone los químicos en los alimentos”, según el portal WebMD.

Medline Plus señala que existen diferentes tipos de cálculos renales. Los cálculos pueden desarrollarse cuando la orina tiene un alto contenido de ciertas sustancias que forman cristales y estos cristales pueden convertirse en cálculos a lo largo de semanas o meses. Por su parte, los cálculos de calcio son los más comunes. Estos se producen con mayor frecuencia en los hombres con edades entre los 20 a 30 años.

Además, el calcio puede mezclarse con otras sustancias para formar el cálculo. Es acá donde el oxalato toma protagonismo siendo el más común de estos. El oxalato está presente en ciertos alimentos como las espinacas, el marañón y la remolacha, entre otros. Aquí algunos de los alimentos que se deben evitar para el desarrollo de cálculos renales:

Proteína animal

  • “Muchas fuentes de proteínas aumentan la cantidad de ácido úrico que se produce. Comer grandes cantidades de proteína también reduce un químico de la orina llamada citrato. El trabajo del citrato es prevenir la formación de cálculos renales”, añade Healthline.
  • Por esta razón, las personas deben limitar la ingesta de pescado, huevos, queso y carne de res.
  • Como alternativas, se pueden reemplazar con semillas de chía, hummus, quinua o tofu.

Bebidas carbonatadas

  • Las bebidas carbonatadas como las energizantes, jugos comerciales y refrescos artificiales, aumentarán el riesgo de desarrollar cálculos renales e incluso pueden provocar enfermedad renal.
  • “La cola tiene un alto contenido de fosfato, otra sustancia química que puede promover la formación de cálculos renales de oxalato de calcio”, explica Healthline.
  • Como una alternativa, se pueden usar jugos de granada, arándano natural, frutos congelados o rodajas de cítricos.

Comidas con alto contenido de oxalato

  • Existen diferentes tipos de cálculos renales. El más común son los cálculos de oxalato de calcio. “Se forma cuando el calcio de la orina se combina con el oxalato, una sustancia química que se encuentra naturalmente en muchos alimentos”, indica el portal WebMD.
  • Por ello, cualquier persona que haya padecido este tipo de cálculos renales debe evitar los alimentos con alto contenido de oxalato. Sin embargo, es una tarea difícil ya que muchos alimentos de oxalato se basan en plantas saludables para consumir.
  • No obstante, WebMD sugiere a las personas que traten de limitar la ingesta de: almendras marañon, espinaca, papas al horno con piel, cereales de trigo, remolacha, frambuesas cacao en polvo y endulzantes.

Sal

  • El uso de sal agregada por medio de alimentos procesados o saleros de mesa fomentan la retención de liquido, lo cual hace que el exceso de sodio no se elimine del cuerpo, por esta razón, los riñones y la presión arterial se ponen en peligro.
  • Healthline señala que una dieta alta en sodio también puede promover la acumulación de calcio en la orina, lo que pone al cuerpo en riesgo de desarrollar cálculos renales de oxalato de calcio.

Productos lácteos

  • Para las personas que son propensas a los cálculos renales, el calcio de los lácteos podría ser su peor enemigo.
  • Este tipo de producto aumenta la excreción del calcio en la orina, favoreciendo la formación de cálculos renales y dificultando la eliminación de desechos.

Cafeína

  • El consumo de cafeína en exceso en té, soda o café puede estresar los riñones y llevar al desarrollo de cálculos renales gracias a los altos niveles de calcio en la orina.
  • Incluso pueden conducir a un fallo renal debido a las cantidades estimulantes que causan agotamiento de los órganos.

Endulzante artificial y bebidas azucaradas

  • Varios estudios demuestran que los endulzantes no calóricos deterioran la función renal si estos se consumen a largo plazo.
  • Por esta razón es mejor optar por endulzantes naturales como el agave o la miel.
  • Las personas que padecen cálculos renales no tienen que preocuparse demasiado por limitar su ingesta de sodio, sin embargo, el azúcar es una preocupación importante.
  • Los pacientes deben evitar cualquier alimento o bebida que esté hecha con azúcar o jarabe de maíz con alto contenido de fructosa.
  • Se pueden reemplazar por bebidas con alto contenido de citrato como la limonada, ya que el citrato puede ayudar a bloquear o reducir la formación de cálculos renales por ácido úrico.