La fibra es una sustancia que se encuentra en las plantas y proporciona muchos beneficios de salud, pues mejora el tránsito intestinal, lo cual es ideal para perder peso, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Por ello, la biblioteca reveló que los alimentos ricos en fibra que pueden ayudar a perder peso son:

  • Lechuga, acelga, zanahorias crudas y espinaca.
  • Patatas (papas) y batatas al horno con cáscara.
  • Brócoli, alcachofas, calabazas y judías verdes (ejotes).
  • Legumbres, tales como lentejas, frijoles negros, arvejas (chícharos) secas, frijol colorado, habas y garbanzos.
  • Nueces y semillas, como semillas de girasol, almendras, pistachos y pacanas.
  • Manzanas y plátanos (bananos).
  • Melocotones y peras.
  • Mandarinas, ciruelas y bayas.
  • Higos y otras frutas deshidratadas.
  • Kiwis.
  • Cereales calientes, como avena.
  • Pan de grano integral.
  • Arroz integral.
  • Quínoa.
  • Palomitas de maíz.
  • Cereales ricos en fibra, como salvado, trigo triturado y trigo inflado.
  • Pastas de trigo integral.
  • Panecillos de salvado.

No obstante, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades de los alimentos ya nombrados, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

Por su parte, otras recomendaciones para bajar de peso son:

  • Desayunar con tiempo todas las mañanas: un desayuno saludable puede evitar la ingesta de alimentos de manera frecuente.
  • Modificar el tiempo en el celular y otras pantallas: comer con los ojos puestos en la televisión, la computadora o cualquier otra pantalla distractora aleja la mente de lo que se está comiendo. No solo se pierde la degustación de los alimentos, sino que se es más propenso a comer en exceso.
  • Preparar los propios alimentos en casa tanto como se pueda: la alimentación que se realiza en casa puede tener ingredientes más saludables que los que se consumen en la calle.

Sobre la misma línea, es importante hacer ejercicio y experimentar diferentes tipos es una buena recomendación. Por ejemplo, los ejercicios de cardio, también conocidos como aeróbicos, son los más implementados cuando se busca quemar calorías y reducir el peso corporal. Sin embargo, los que involucren pesas ayudan al cuerpo a quemar grasa, mientras se construye masa muscular, lo que también funciona para acelerar el metabolismo.

Además, es bueno seguir las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana, para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad.

De todos modos, las personas se preguntan cuál es el mejor horario para hacer ejercicio y los expertos aseguran que la mejor hora para hacer ejercicio y obtener resultados significativos es en la que la persona se sienta más productiva, pues será el momento en el que el organismo quemará más grasa, pero lo importante es cumplir con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.

De igual forma, los expertos recomiendan tomar agua, pues de esta forma se eliminan las toxinas. No obstante, el consumo diario de este líquido es distinto para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general los hombres deberían consumir 3,7 litros de agua al día y las mujeres deberían beber 2,7 litros.