La tendinitis es la inflamación severa de un tendón, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Asimismo, explicó en su portal web que la tendinitis ocurre en forma usual tras una lesión recurrente en articulaciones como la muñeca o el tobillo. Algunos tipos comunes de tendinitis son nombrados según el deporte que aumenta su riesgo de sufrirla, como el “codo de tenista”.

De hecho, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, indicó que la mayoría de los casos de tendinitis se pueden tratar eficazmente con reposo, fisioterapia y medicamentos para reducir el dolor, pero si es grave y ocasiona la rotura de un tendón, probablemente se necesite una cirugía.

No obstante, el portal Carreras Populares reveló que la mejor forma para prevenir la tendinitis es con una buena alimentación y señaló que los mejores alimentos y vitaminas son:

1. Piña: es diurética, antiinflamatoria y rejuvenecedora.

2. Vegetales de hoja verde: son ricas en vitamina K y esta ayuda a promover la coagulación sanguínea.

3. Vitamina C: el cuerpo necesita vitamina C para producir colágeno, una proteína necesaria para la cicatrización de las heridas.

4. Omega 3: proporcionan calorías para dar al organismo energía y tienen muchas funciones en el corazón, los vasos sanguíneos, los pulmones, el sistema inmunitario y el sistema endocrino (la red de glándulas productoras de hormonas).

5. Magnesio y el silicio: regulan la función de los músculos y el sistema nervioso, los niveles de azúcar en la sangre, y la presión sanguínea.

6. Vitamina B1 (tiamina): ayuda a las células corporales a convertir los carbohidratos en energía. También es esencial para el funcionamiento del corazón y las neuronas sanas.

7. Ácido patoténico (B5): es esencial para el metabolismo de los alimentos. También desempeña un papel en la producción de hormonas y colesterol.

8. Agua: el agua es uno de los principales componentes del cuerpo humano, ya que representa entre el 50 % y 70 % del peso corporal y lubrica y amortigua las articulaciones.

Sobre la misma línea, para reducir el riesgo de padecer tendinitis, la entidad sin ánimo de lucro sugirió seguir estas sugerencias:

  • Combinarlo. Si un ejercicio o actividad causa un dolor persistente y particular, se debe intentar otra cosa. Los ejercicios con máquinas pueden ayudar a combinar un ejercicio de carga por impacto, como correr, con ejercicios de menor impacto, como andar en bicicleta o la natación.
  • Mejorar la técnica. Si la técnica en una actividad o ejercicio es deficiente, puede estar predisponiendo a la persona a tener problemas con los tendones. Se debe considerar tomar clases u obtener instrucciones profesionales cuando se comienza un deporte nuevo o cuando se usan equipos para ejercicios.
  • Estirar. Después del ejercicio, se debe tomar un tiempo para estirar, y así poder maximizar la amplitud de movimiento de las articulaciones. Esto puede ayudar a minimizar los traumatismos reiterados en tejidos tensos. El mejor momento para estirar es después del ejercicio, cuando los músculos entraron en calor.
  • Usar una correcta ergonomía en el lugar de trabajo. Si es posible, se debe hacer una evaluación ergonómica del lugar de trabajo y se debe ajustar la silla, teclado y escritorio siguiendo las recomendaciones para la estatura, longitud de brazos y tareas habituales. Esto ayudará a proteger todas las articulaciones y tendones de la tensión excesiva.
  • Preparar los músculos para practicar deportes. Fortalecer los músculos que se usan en la actividad o deporte puede ayudarlos a resistir mejor el esfuerzo y la carga.