La demencia es reconocida como la pérdida de la función cerebral que se presenta con ciertas enfermedades. El mal de Alzheimer es la forma más común de demencia y afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento, según Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Las causas que ocasionan la enfermedad de Alzheimer no están claras. Por ahora, las investigaciones muestran que ciertos cambios en el cerebro están asociados a este padecimiento, pero falta más análisis al respecto.

Lo que sí es claro, según los expertos, es que una persona es más propensa a enfrentar esta situación si es mayor, aunque el desarrollo de esta enfermedad no es parte del envejecimiento normal; tiene un pariente consanguíneo cercano, como un hermano, hermana o padre con alzhéimer y si tiene ciertos genes ligados a esta enfermedad.

La enfermedad de Alzheimer comienza a manifestarse con la pérdida de memoria. | Foto: Getty Images / PamelaJoeMcFarlane

Información del instituto Mayo Clinic indica que los medicamentos pueden mejorar temporalmente los síntomas o retardar su progresión; ayudar a prolongar al máximo las funciones y a que las personas puedan desenvolverse de forma independiente por un tiempo.

Sin embargo, no hay ningún tratamiento que cure la enfermedad de Alzheimer o que altere la evolución de este padecimiento en el cerebro. “En las etapas avanzadas de la enfermedad, las complicaciones derivadas de la pérdida grave de la función cerebral (como la deshidratación, la malnutrición o la infección) provocan la muerte”, precisa la mencionada institución.

La enfermedad de Alzheimer en sus etapas avanzadas puede ocasionar otras complicaciones de salud. | Foto: Getty Images

Pérdida de memoria, el primer signo

Son diversas las señales que advierten que la enfermedad está en proceso y una de las primeras y más comunes, especialmente en las etapas tempranas, es la pérdida de memoria.

Olvidar información recién aprendida es una de las primas advertencias del padecimiento. También pasa que las personas no recuerdan fechas o eventos importantes, piden la misma información repetidamente, dependen de sistemas de ayuda para la memoria (tales como notitas o dispositivos electrónicos) o se apoyan en familiares para hacer las cosas que antes hacían solos, precisa la Alzheimer´s Association.

La alimentación es clave para ayudar a prevenir el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. | Foto: Getty Images

Al principio, una persona con la enfermedad puede ser consciente de que tiene dificultades para recordar las cosas y organizar los pensamientos. No obstante, con el paso del tiempo no será tan consciente y es más probable que familiares y amigos noten cómo empeoran los síntomas.

Más señales

  • Dificultad para planificar o resolver problemas. Con el avance de la enfermedad, algunas personas experimentan cambios en su habilidad de desarrollar y seguir un plan o trabajar con números. Pueden tener dificultad en seguir una receta conocida o manejar las cuentas mensuales o inconvenientes para concentrarse y les puede costar más tiempo hacer cosas que antes.
El Alzheimer generalmente puede afectar desde los 60 años. | Foto: Getty Images / Yoshiyoshi Hirokawa
  • Desorientación de tiempo o lugar. A las personas con este padecimiento se les olvidan las fechas y el paso del tiempo. Pueden tener dificultad en comprender algo si no está en proceso en ese instante. Es posible que se les olvide a veces dónde están y cómo llegaron allí.
  • Dificultad para comprender imágenes visuales. Para algunas personas, tener problemas de la vista es una señal del alzhéimer. Pueden tener dificultad en leer, juzgar distancias y determinar color o contraste, lo cual puede causar problemas para conducir un vehículo, por ejemplo.
La enfermedad de Alzheimer no necesariamente está relacionada con el envejecimiento. | Foto: Getty Images
  • Colocación de objetos fuera de lugar. Suelen colocar cosas en sitios diferentes e incluso hay oportunidades en las que es posible que acusen a los demás de robarles. Esto puede ocurrir más frecuentemente con el paso del tiempo.
  • Disminución o falta del buen juicio. Las personas que padecen de alzhéimer pueden experimentar cambios en el juicio o en tomar decisiones. Por ejemplo, es posible que regalen grandes cantidades de dinero a las personas que venden productos y servicios por teléfono.
  • Pérdida de iniciativa en el trabajo o en actividades sociales. Una persona con la enfermedad de Alzheimer puede empezar a perder la iniciativa para ejercer pasatiempos, actividades sociales, proyectos en el trabajo o deportes.
La enfermedad de Alzheimer es un trastorno neurológico progresivo que hace que el cerebro se encoja. | Foto: Getty Images
  • Cambios en el humor o la personalidad. El humor y la personalidad de estos pacientes pueden cambiar. Es posible que se sientan confundidas, deprimidas, temerosas o ansiosas. Se pueden enojar fácilmente en casa, en el trabajo, con amigos o en lugares donde están fuera de su ambiente.

Complicaciones

Mayo Clinic indica que la pérdida de la memoria y del lenguaje, el deterioro del juicio y otros cambios cognitivos causados por la enfermedad de Alzheimer pueden complicar el tratamiento de otras enfermedades. Una persona con este padecimiento es posible que no pueda hacer lo siguiente:

  • Expresar que siente dolor
  • Informar síntomas de otra enfermedad
  • Seguir un plan de tratamiento indicado
  • Informar efectos secundarios de los medicamentos
La enfermedad de Alzheimer dificulta el desarrollo de diversas funciones. | Foto: peter dazeley/Getty Images

A medida que la enfermedad de Alzheimer avanza hacia las últimas etapas, los cambios en el cerebro comienzan a afectar las funciones físicas, como tragar, mantener el equilibrio y el control del intestino y de la vejiga. Estos efectos pueden aumentar la vulnerabilidad frente a otros problemas de salud tales como:

  • Inhalación de alimentos o líquidos hacia los pulmones (aspiración).
  • Gripa, neumonía y otras infecciones.
  • Caídas.
  • Fracturas.
  • Escaras.
  • Malnutrición y deshidratación.
  • Estreñimiento o diarrea.
  • Problemas dentales como llagas en la boca o caries.
El mal de Alzheimer empieza a manifestarse con una pérdida de memoria. | Foto: Iza Habur

Prevención

La enfermedad de Alzheimer no se puede prevenir. Sin embargo, sí es posible modificar algunos factores de riesgo en el estilo de vida. Las pruebas sugieren que los cambios en la alimentación y el ejercicio podrían reducir el riesgo de desarrollar esta afección y otros trastornos que causan demencia. Las opciones para un estilo de vida saludable para el corazón que pueden reducir el riesgo de enfermedad de Alzheimer incluyen las siguientes:

Los cambios en los hábitos de vida pueden ayudar a prevenir el desarrollo del mal de Alzheimer. | Foto: Getty Images
  • Hacer ejercicio en forma regular.
  • Llevar una alimentación de productos frescos, aceites saludables y alimentos bajos en grasas saturadas, como la dieta mediterránea.
  • Seguir las pautas de tratamiento para controlar la presión arterial alta, la diabetes y el colesterol alto.
  • Si la persona fuma, es importante dejar de hacerlo.

Los análisis científicos han demostrado que participar en eventos sociales, leer, bailar, jugar juegos de mesa, crear arte, tocar instrumentos musicales y otras actividades que requieren un compromiso mental y social ayudan a conservar las capacidades intelectuales en la edad adulta y reducen el riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer.

El apoyo familiar y social es clave para el manejo del alzhéimer. | Foto: Libre de derechos