Para la mayoría de las personas, las arrugas son un problema que quisieran eliminar de inmediato o por lo menos atrasarlo unos años. Generalmente, al llegar a la etapa de la tercera edad, incluso antes, hacia los 30 años, la gente empieza a tener varias marcas en el cutis, siendo la mayoría el resultado del envejecimiento de la piel como un proceso natural del ser humano.
Sin embargo, con el afán de eliminarlas rápidamente se inclinan por procedimientos estéticos como el botox, que en algunos casos puede generar problemas más graves en la dermis. La buena noticia es que existe una especie capaz de eliminar estas marcas de la piel: el anís. Si bien, la combinación de su composición es la que le da la capacidad de tener un efecto similar al del bótox, según la Clínica Vicario de España.
El magazín El Mundo Deportivo, en su sección de belleza y salud, señala que los componentes principales de esta planta aromática son los aceites esenciales como el cineol y el linalol, el anetol, el estragol, los taninos, la pectina, los mucílagos y las vitaminas A, del grupo B y C.
Se considera ideal para prevenir la aparición de signos de la edad en el rostro, ya que acelera la producción de colágeno en la piel. Además, tiene poderosas propiedades antioxidantes que protegen el cutis de agentes externos, según el portal especializado en belleza y bienestar, PanoramaWeb.
Propiedades del anís
Favorece la producción de colágeno
- Esta especia es perfecta para aumentar la producción natural de colágeno del cuerpo.
- Tanto para prevenir como para atenuar las arrugas y marcas de expresión en el rostro, es necesario que el cuerpo mejore la producción de colágeno, un componente vital para la elasticidad, la firmeza y la regeneración de la piel.
Relajante muscular
- Cuando esta planta se toma en infusión, uno de los principales efectos que tiene es que produce un gran estado de relajación que permite que los músculos descansan e induce al sueño.
- Así, aplicado de forma externa, este tipo de anís logra que se relajen los músculos de la cara, sin llegar a adormecerlos ni producir ningún problema en ellos, lo suficiente para evitar que se tensen en exceso y aparezcan arrugas y líneas de expresión.
Efecto antioxidante para una piel tersa
- Al incrementar la producción de colágeno y aportar vitaminas antioxidantes esta especia sirve para que la piel esté más firme, tersa y suave, reduciendo visiblemente las marcas en ella.
- El efecto antioxidante del anís se puede aprovechar solo para la piel, aplicándolo de forma externa o para todo el organismo, incluida la dermis, si se ingiere como acompañamiento en los platos o en infusión.
Aceite de anís estrellado para las arrugas
El aceite de anís estrellado contiene sus componentes y propiedades de forma concentrada y es muy fácil de aplicar. Este aceite se puede encontrar en tiendas naturistas.
- Lavar bien el rostro eliminando cualquier rastro de maquillaje o de suciedad y secarlo suavemente con una toalla limpia.
- Aplicar unas pocas gotas en la yema de los dedos, entre 3 y 4 gotas bastará, y frotar las yemas para calentar un poco el aceite.
- Con suaves y rápidos toques aplicar el aceite en las zonas en las que hay más posibilidades de aparición de arrugas, como el contorno de los ojos, de los labios y la frente, o en las partes en las que ya existan tanto líneas de expresión como marcas más profundas.
- Dejar que se seque solo y no lavar la cara hasta pasado el máximo de tiempo posible, por eso, se recomienda hacerlo por las noches antes de ir a dormir.
Mascarilla de anís estrellado para las arrugas
Una mascarilla que se puede preparar con más ingredientes para que sea más completa y conseguir un mayor efecto antiarrugas.
Ingredientes
- 4 cucharadas de anís estrellado en polvo (equivale a unos 40gr).
- 1 clara de huevo.
- 250ml de agua.
- 1 cazo o olla pequeña.
- 1 pincel para mascarillas.
Preparación
- Separar la clara de huevo de la yema y reservar la clara para usarla más tarde.
- Poner a hervir el agua y cuando llegue al punto de ebullición añadir el anís en polvo o machacado.
- Permitir que hierva por 5 minutos, o máximo 10, retirar del fuego y dejar que se enfríe.
- Una vez enfriada, mezclar esta infusión con la clara de huevo hasta conseguir una mezcla uniforme y con textura como una pasta ligera.
- Cuando el rostro esté bien limpio, aplicar la mascarilla con la ayuda de un pincel en toda la cara, evitando los ojos, pero insistiendo en las zonas en las que la piel suele arrugarse con más facilidad.
- Dejar que actúe por 20 o 30 minutos y se note bien seca.
- Retirar la mascarilla con agua abundante y fría y secar la cara con una toalla limpia suavemente.
- Aplicar luego la crema hidratante ligera para el rostro que se usa habitualmente.