Una de las claves para mantener un peso saludable y evitar que los kilos aumenten es controlar el apetito. En muchas oportunidades las personas llevan una dieta saludable y realizan actividad física, pero su ansiedad por la comida les impide alcanzar el peso deseado.
Saber elegir los alimentos adecuados y combinarlos bien ayuda al cuerpo a tener sensación de saciedad que evita estar comiendo de forma permanente y acumulando calorías, precisa el portal Mejor con Salud. Los jugos son una forma rápida para obtener una buena dosis de vitaminas y minerales como parte de una dieta equilibrada y balanceada.
Un estudio publicado por la Universidad de Harvard indica que la alimentación desempeña un papel importante para mejorar tanto la calidad de vida como el peso. Aunque es importante vigilar la cantidad de calorías, también es clave tener en cuenta la calidad de los alimentos para controlar el apetito y prevenir el sobrepeso.
El consumo de bebidas elaboradas a partir de frutas, verduras permite mejorar el rendimiento físico y mental al aumentar los niveles de energía, contribuye a la saciedad y apoya la desintoxicación del cuerpo, en beneficio de la salud del organismo.
Existen algunas recetas que son ideales para reducir las ganas permanentes de comer y que permiten alimentarse de manera muy natural.
1. Jugo de manzana y linaza. Es una bebida que quita el apetito, gracias a que es rico en fibra y agua lo que aporta saciedad al estómago, elimina la retención de líquidos y limpia el tracto intestinal. Según la revista Glamour, de México, se puede preparar licuando una manzana verde sin pepas, picada en trocitos y una cucharada de linaza previamente hidratada, una cucharadita de canela en polvo y un tercio de taza de agua. Una vez mezclados los ingredientes, la bebida está lista para consumir.
Además de ser clave en el proceso de saciar el organismo, según un estudio de la Universidad de Teherán, las manzanas ayudan a prevenir problemas cardiovasculares.
2. Jugo de zanahoria y avena. Este licuado posee carbohidratos complejos que se caracterizan por ser de lenta absorción y, por lo tanto, no generan subidas de glucosa en la sangre. Esto se traduce en mayor saciedad y menos ansiedad de comer alimentos altos en azúcar. Para elaborarlo, se agrega en la licuadora tres zanahorias peladas, el jugo de una naranja, dos cucharadas de avena y un poquito de agua. Una vez mezclado puede consumirse de manera inmediata.
3. Frutos rojos, yogur y nueces. Esta bebida es rica en fibra soluble, lo que hace que la persona se sienta llena por más tiempo. Además, contiene probióticos que luchan contra los antojos del azúcar.
Para elaborarlo se mezcla un tercio de taza de moras azules, una cantidad igual de frambuesas y de fresas, dos cucharadas de yogur griego sin azúcar y un puñado de nueces. Se mezclan todos los ingredientes en la licuadora. Si la persona quiere un batido más fresco y tipo helado puede congelar las frutas antes de procesarlas.
4. Jugo de piña y chía. Esta fruta tiene pocas calorías y mucha agua, mientras que las semillas de chía ofrecen un efecto “llenador” y el aroma de la menta suprime el apetito. Se pueden mezclar dos cucharadas de chía, unas hojas de menta, el jugo de un limón y un poquito de agua.
5. Jugo de zanahorias, perejil y manzana verde. Los ingredientes de este jugo contienen agua, vitaminas, minerales, fibra y otras importantes sustancias que ayudan al cuerpo a mantenerse satisfecho mientras estimulan su limpieza para eliminar las toxinas que impiden adelgazar, según indica Mejor con Salud.
Para prepararlo se requiere de dos zanahorias, un puñado de perejil, un pepino, dos manzanas verdes y medio vaso de agua. Se lavan y trocean todos los ingredientes antes de llevarlos a la licuadora en donde se mezclan con el agua hasta obtener una mezcla homogénea. Se consume un vaso en ayunas y se toma más durante la jornada si la persona lo considera necesario.
Es importante tener claro que si bien se trata de productos naturales se debe validar que no generen algún tipo de reacción adversa y en caso de que esto suceda, lo mejor es consultar al médico.