Existen varios remedios caseros que pueden ayudar a reducir la presión arterial alta de manera inmediata. Algunos de ellos incluyen sumergir los pies en agua tibia durante unos minutos, practicar ejercicios de respiración profunda y beber té de manzanilla. Estos métodos pueden proporcionar un alivio temporal.
Además, hay otros remedios caseros como el agua de ajo, el té de alpiste y el té de flor de Jamaica, que se pueden incorporar a la dieta y a la rutina diaria para ejercer un efecto hipotensor a largo plazo.
“Es importante tener en cuenta que, aunque estos remedios caseros pueden ser útiles como complemento del tratamiento para la presión arterial alta, deben ser utilizados bajo la supervisión de un cardiólogo. No deben reemplazar el tratamiento médico prescrito y pueden interactuar con la medicación para la hipertensión. Es fundamental seguir las indicaciones y recomendaciones del médico en todo momento”, así lo dio a conocer Healthline.
Remedios caseros para la presión arterial
Jugo de apio y naranja
De acuerdo con el portal Tua Saúde, “el jugo de apio, conocido también como apio España o celery, ayuda a disminuir la presión arterial debido a que posee propiedades vasodilatadoras”. Asimismo, la naranja es una fruta con un excelente aporte de potasio, mineral que favorece la salida de sodio del organismo a través de la orina.
Ingredientes
- 3 palos de apio España;
- 3 naranjas.
Modo de reparación
Licuar todos los ingredientes y beber bien frío.
Otros remedios naturales
Té de hojas de olivo
Las hojas de olivo son consideradas como un efectivo remedio natural para combatir la presión arterial alta. Sus polifenoles actúan regulando la presión arterial y logran disminuirla, sin generar el riesgo de una hipotensión, incluso si se consumen en cantidades excesivas.
Además de su acción reguladora sobre la presión arterial, las hojas de olivo también poseen un suave efecto calmante y relajante, lo que puede ayudar a controlar los síntomas en personas que sufren de ansiedad constante.
Ingredientes
- 2 o 3 cucharadas de hojas de olivo secas;
- ½ taza de agua hirviendo.
Modo de preparación
Colocar las hojas de olivo en una taza con agua hirviendo, dejándola reposar entre 5 a 10 minutos. Después, colar y beber tibio 3 o 4 tazas a lo largo del día.
Aparte del té, también existe el extracto de hojas de olivo, que puede comprarse en tiendas de productos naturales bajo la presentación de cápsulas, las cuales pueden ser consumidas en una dosis de 500 mg, 2 veces al día después de las comidas.
Vino tinto
Medlineplus aseguró que “el vino, especialmente el vino tinto, contiene polifenoles, que son antioxidantes que pueden ayudar a reducir la presión arterial al relajar los vasos sanguíneos. Para aprovechar este beneficio, se recomienda consumir de manera regular de 1 a 2 copas de vino tinto al día, siendo cada copa de aproximadamente 125 ml”.
El jugo de uva también proporciona beneficios para la salud, pero es importante tener en cuenta que el alcohol presente en el vino aumenta la absorción de los compuestos beneficiosos de la uva. Además, los polifenoles se encuentran más concentrados en el vino en comparación con el jugo de uva.
Té de cúrcuma
Por contener curcumina, una sustancia con potente acción antioxidante, la cúrcuma ayuda a combatir los radicales libres, mejorando las funciones de los vasos sanguíneos, promoviendo el relajamiento de las arterias y bajando la presión.
Ingredientes
- 1 cucharadita de polvo de cúrcuma
- 150 ml de agua hirviendo.
Modo de preparación
Colocar la cúrcuma en el agua hirviendo y dejar reposar durante unos 10 a 15 minutos. Después, dejar entibiar y beber hasta 3 tazas al día entre las comidas.