La piel cambia a medida que la persona envejece y es posible que se observen arrugas, manchas por la edad y resequedad. Además, la piel también se hace más delgada y pierde grasa, tornándose menos suave y lisa, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Por tal razón, para reducir las arrugas las personas recurren a productos cosméticos o técnicas quirúrgicas que en ocasiones suelen ser costosas y pueden traer consecuencias adversas, pero el portal de México Panorama Web reveló que existen recetas caseras que ayudan a rejuvenecer la piel, como el uso de la cáscara de ajo, ya que está lleno de nutrientes y antioxidantes que son ideales para el cuidado de la piel.
En consecuencia, para obtener los resultados se debe mezclar la cáscara de ajo con un poco de miel y limón. Se deben integrar todos los ingredientes hasta obtener una pasta y se aplica en el rostro por diez minutos. Finalmente, con agua fría se retira la mezcla. Este procedimiento se puede realizar tres veces por semana para ver los beneficios.
Asimismo, es ideal para reducir las manchas del rostro; solo se deben hervir las cáscaras de ajo y el agua cuando se enfríe se usa para lavar el rostro y esto se realiza dos veces a la semana por las noches para obtener resultados.
De igual manera, es bueno para reducir el acné, ya que tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Por ende, se debe mezclar una cáscara de ajo con media cucharadita de cúrcuma y diez mililitros de agua. Después, cuando se consiga una mezcla homogénea, se aplica en las zonas afectadas por diez minutos y se retira con agua fría.
Sobre la misma línea, otra manera natural de reducir las arrugas es realizando masajes diarios por un minuto. El primero es levantar la cabeza y abrir y cerrar la boca como si se estuviese masticando chicle. El segundo es tener la lengua afuera, también con la cabeza hacia arriba y, el tercero es poner la lengua en el paladar, sonreír y tragar saliva mientras se mira al techo.
Por su parte, existen otros consejos para proteger la piel y minimizar la aparición de arrugas, de acuerdo con Mayo Clinic:
1. Proteger la piel del sol. Limitar el tiempo que se pasa al sol, especialmente al mediodía, y usar siempre ropa protectora, como sombreros de ala ancha, camisas de manga larga y gafas de sol. Se debe elegir un producto para el cuidado de la piel con un factor de protección solar (SPF), pues la American Academy of Dermatology (Academia Estadounidense de Dermatología) recomienda usar un protector solar de amplio espectro con SPF de 30 o más.
2. Humectar la piel. La piel seca arruga las células turgentes de la piel, lo que puede provocar líneas delgadas y arrugas prematuras. La hidratación atrapa el agua en la piel, lo que ayuda a enmascarar las pequeñas líneas y pliegues.
3. No fumar. Aunque se haya fumado durante años o se fume mucho, dejarlo puede mejorar el tono y la textura de la piel, así como prevenir las arrugas.
4. Seguir una dieta saludable. Existen algunas pruebas de que ciertas vitaminas en la dieta ayudan a proteger la piel. Se necesita estudiar más el rol de la nutrición, pero es bueno consumir muchas frutas y vegetales, según la entidad sin ánimo de lucro.