Las arrugas son uno de los primeros signos que aparecen producto del envejecimiento. Se muestran en la superficie de la piel y se caracterizan por un hundimiento causado por la pérdida de elasticidad debido al paso de los años u otros factores genéticos o ambientales.
Con los años, el cuerpo va perdiendo la capacidad para producir algunas sustancias que cumplen una función hidratante, lo que hace que la piel se seque y se arrugue.
A esto se suman otros factores, como la exposición a los rayos UV o las lámparas de bronceado que aceleran el proceso de envejecimiento de la piel al dañar el tejido conectivo. Una menor efectividad de este último conduce a dificultades en el soporte de la piel y, en consecuencia, a la formación temprana de arrugas, indica el portal Hola Doctor.
El movimiento constante de los músculos faciales superficiales también provoca un deterioro lento de la piel en esas áreas específicas, así como el consumo de alcohol y cigarrillo, prácticas que influyen en el comportamiento del flujo sanguíneo a las células de la piel, promoviendo así una formación temprana de arrugas y el envejecimiento de ésta.
De igual forma, al avanzar la edad se presenta una pérdida de colágeno debido al descenso de estrógenos. En consecuencia, la piel adelgaza, pierde elasticidad y firmeza y se reduce la capacidad de retener el agua en su interior, por lo que se deshidrata fácilmente, llevando, además de las arrugas, a que el rostro se vea maltratado y sin vitalidad. Esto se presenta porque el paso de nutrientes de la dermis (la capa más profunda de la piel) a la epidermis (la superficial) no se produce de la manera correcta, según afirma el portal Saber Vivir TV.
Remedios caseros
Para hacerle frente a estos signos existen algunos remedios caseros que pueden ayudar a mitigarlos.
Aceite de moringa: De la semilla de árbol Moringa Oleífera se extrae un aceite con propiedades antioxidantes. En el antiguo Egipto se usaba como bálsamo para la piel, pero hoy en día todavía es poco conocido. El portal Mejor con Salud indica que este aceite penetra bien en todo tipo de pieles y no solo ayuda a disimular de manera progresiva las arrugas, sino que también suaviza, calma y desinflama posibles irritaciones.
Mascarilla de aguacate: Esta fruta es rica en antioxidantes, con los que se puede proteger y ralentizar el envejecimiento que sufren constantemente las células de la piel. Gracias a estos antioxidantes obtenidos por sus carotenoides, así como por la vitamina E, el aguacate es ideal para devolverle elasticidad a la piel.
Existen diversas formas de usar el aguacate para atenuar las arrugas. Una de ellas es mezclar la pulpa de medio aguacate, una clara de huevo y medio limón exprimido y aplicar durante tres minutos antes de lavar con agua fría.
También, se puede triturar un aguacate, medio plátano y media taza de leche hasta formar una textura cremosa y, después, aplicar esta mascarilla sobre el rostro, el cuello y el escote. Se deja actuar por 25 minutos, se lava con agua fría y se repite dos veces a la semana para atenuar líneas profundas y dar luminosidad a la piel, indica un artículo de la revista Glamour de México.
Miel: Es un producto muy hidratante y ayuda a reflexibilizar la piel. Se puede mezclar con pulpa de manzana o con yogur para ayudar a reducir las líneas de expresión. También se puede utilizar con yogur y puré de papa natural, ya que este último producto tiene propiedades astringentes y limpiadoras. Esta mezcla, además de hidratar y mejorar el aspecto de la piel, reduce las arrugas y elimina imperfecciones y acné, según Mejor con Salud.
Pepino: Se puede usar solo, cortado en rodajas y aplicarlo directamente sobre la piel, para evitar bolsas, hinchazón de los párpados y cansancio en los ojos. De igual forma, puede utilizarse en mascarilla, mezclándolo con yogur y se aplica en la noche.
Gimnasia facial: La gimnasia facial también podría contribuir a disimular las arrugas, realizándola todos los días de manera adecuada. Si se lleva a cabo justo después de aplicar el aceite de moringa o rosa de mosqueta, mejorará la absorción y potenciará los beneficios de la gimnasia. Hacer ejercicio con los músculos de la cara ayuda a recuperar la elasticidad y tonicidad de los tejidos y combate las tensiones que también influyen en la aparición prematura de las arrugas.