El cuerpo está constituido por diferentes estructuras y una de ellas son las articulaciones, las cuales permiten que se efectúe la flexibilidad a la hora de realizar un movimiento. Sin embargo, no todos los organismos son iguales, lo que significa que por diversas causas aparecen complicaciones y una de ella es la artritis.
De acuerdo con la Clínica de Mayo, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, cuando hay hinchazón o sensibilidad en una o más articulaciones se diagnostica con la enfermedad de artritis. Por lo general, las partes que mayormente se ven comprometidas son las rodillas, las manos, los pies y la cadera.
Asimismo, los especialistas dicen que las dolencias y la rigidez suelen ser signos asociados a la artritis. En adición, hay dos principales tipos para identificar esta complicación: la artrosis y la artritis reumatoide.
Respecto a la artrosis, “hace que el cartílago, el tejido duro y resbaladizo que recubre los extremos de los huesos donde forman una articulación, se rompa”. En cuanto a la artritis reumatoide, se da cuando el sistema inmune impacta en las articulaciones y dejan de ser protegidas.
Sea cual sea el tipo de artritis que una persona padezca, los Institutos Nacionales de la Salud en Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) precisan que nunca es tarde para tratar y prevenir las enfermedades de las articulaciones, puesto que son importantes para ejercer tareas diarias como caminar o escribir.
“Si tiene artritis, es crucial que su médico diagnostique qué tipo de artritis tiene para que pueda recibir el tratamiento adecuado. Afortunadamente, los tratamientos actuales permiten que la mayoría de las personas con artritis lleven una vida activa y productiva”, comentan los profesionales de la salud en Norteamérica.
En ese orden de ideas, hoy en día existen varias alternativas médicas para contribuir a la mejora de la artritis, puntualmente al síntoma del dolor que puede llegar a ser insoportable en casos extremos. Si bien, varios tratamientos son con fármacos u otros elementos, también existen los denominados remedios naturales.
Gracias a las creencias populares y los estudios científicos, hay postulados en relación con el tratamiento de afecciones en el organismo de manera natural. Precisamente, uno de ellos tiene que ver con las semillas.
La semilla que mitiga el dolor articular
Teniendo en cuenta recopilaciones de la revista de buenos hábitos Mejor con salud, una de las semillas que más se utiliza para mitigar el dolor articular es la que se conoce como la semilla de alholva, la cual se caracteriza por ser un antiinflamatorio natural.
Una investigación publicada en el International Journal of Current Pharmaceutical Review and Research, consigna que el aceite que tiene la semilla de alholva es antioxidante y, a su vez, desinflama, lo que conduce a que reduzca el dolor de la artritis luego de unos meses.
Por su parte, El Español indica que la semilla de alholva también se llama fenogreco, tiene una buena cantidad de fibra, proteínas, calcio, magnesio, fósforo y potasio. Incluso, “empleado regularmente en la dieta contribuye a disminuir la ansiedad por la comida y estimular el crecimiento del cabello”.
Es necesario precisar que la semilla de alholva hace parte de una especie de planta y también se utiliza en el área culinaria como una especia.
Para finalizar, Mejor con salud explica que para consumir la popular semilla antiinflamatoria que ayuda a reducir el dolor de la artritis, hay que agregarla en un vaso de agua y dejarla en remojo por toda una noche. Luego de esto, se ingiere las semilla en ayunas y se desecha el agua.
Hay que decir que antes de considerar adoptar el consumo de la semilla de alholva, lo mejor es consultar con médicos profesionales en el asunto.