El Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel explica que la artritis reumatoide es una enfermedad crónica que impacta de manera negativa las articulaciones de los pies, las muñecas y las manos. Entre sus principales síntomas se encuentran la inflamación, la hinchazón y los dolores que dificultan el movimiento.
La Clínica Mayo enumera las artritis que más se destacan, en las que se encuentran: la séptica, la gota, la osteoartritis, la pulga, la artrosis, la reactiva, entre otras.
Entre los factores de riesgo para desarrollar esta afección se encuentran:
- La obesidad: la Organización Mundial para la Salud (OMS) precisa que “en 2016, más de 1.900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos”. Es entonces que un incremento de peso afecta las articulaciones porque estas deben hacer mayor fuerza.
- Las mujeres son las más propensas a padecer esta afección y los hombres, a desarrollar la gota. Lo anterior no quiere decir que algún género esté exento de padecer alguna enfermedad. Además, los adultos mayores son los más vulnerables a sufrir los síntomas de la artritis.
La terapia que ayuda en la artritis reumatoide
Usualmente, es la fisioterapia la más utilizada para algunas clases de artritis, puntualiza la entidad; sin embargo, el uso de elementos como las férulas puede colaborar a calmar sus síntomas.
Además, la cirugía para tratar la artritis reumatoide no se realiza en todas las personas, sin embargo, los médicos pueden detallar si esta puede solucionar las deformidades producidas por ella.
Algunos otros tratamientos como la hidroterapia o la acupuntura son ideales, siempre y cuando se esté bajo la supervisión de un médico.
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Acupuntura
Es un tratamiento que consiste en aplicar agujas en ciertas áreas del cuerpo para contrarrestar los síntomas de algunas enfermedades, entre ellas, la migraña, la artritis, la sinusitis, por ejemplo.
Tua Saúde explica que la acupuntura se sustenta en una problemática: la acumulación de energía en ciertas zonas del cuerpo, provocando inflamación y cansancio, así como desequilibrando, por lo que la terapia de acupuntura puede tener posibles efectos antiinflamatorios y analgésicos.
Aunque se considera una técnica segura, es importante que la practique un profesional y se desechen las agujas usadas, porque estas pueden ser puentes para transmitir otro tipo de enfermedad.
El portal de salud Healthline precisa que esta afección puede aliviar los síntomas con la ayuda de ciertos ejercicios que desarrollan resistencia, aeróbicos y flexibilidad.
Hidroterapia
La hidroterapia es una de las actividades más completas que pueden contribuir a disminuir esta afección. Al ser una actividad acuática, puede ser llevada a cabo según la condición o la necesidad de cada persona. Para realizar esta terapia física se requiere del acompañamiento de un instructor, quien dirigirá diferentes sesiones.
El portal citado indica los diferentes beneficios que tiene la hidroterapia, en las que se encuentra la mejora de la circulación, lo que contrarresta la ansiedad y la depresión, consideradas trastornos que pueden afectar la vida de una persona.
El sitio web asegura que esta enfermedad autoinmune tiene un impacto en las articulaciones por los radicales libres conocidos como “especies reactivas de oxígeno”.
Por su parte, el portal de salud Tua Saúde explica que esta actividad se debe llevar a cabo con agua caliente a una temperatura de 34 °C, ya que dará una sensación de alivio.
Es importante mencionar que esta terapia se efectúa para tratar no solo artritis, sino: lesiones musculares, hernias, fracturas, entre otras. Antes de ejecutar la hidroterapia, se debe consultar con un médico. Y si una mujer está embarazada, deberá informarse con el obstetra.