En la Guía de Alimentos de la revista, Cuerpomente, la chía es una semilla rica en omega-3, una grasa insaturada que tiene efectos antiinflamatorios que benefician al organismo.

Cabe recordar que el omega-3 es un tipo de grasa poliinsaturada que, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, se encuentra en varios alimentos, como algunas semillas, aceites vegetales, salmón y nueces.

Por ejemplo, los ácidos grasos que componen el omega-3 son buenos para el corazón porque tienen la capacidad de reducir los triglicéridos, disminuir la presión arterial alta, combatir el colesterol y contrarrestar la arritmia, asegura la entidad de ciencia y salud americana. “Estas grasas saludables también pueden ayudar con el cáncer, la depresión, la inflamación”, añade.

Es entonces que el sitio web -Cuerpomente- menciona que el consumo de chía es favorable para el cuerpo porque está compuesto de fósforo, calcio, proteína y mucílagos, una fibra que actúa sobre el intestino.

Cada uno de sus compuestos participa respectivamente en evitar el envejecimiento precoz; en la regulación de los niveles de triglicéridos y de colesterol. Además de ser provechosos para personas con diagnóstico de diabetes.

Pero sin ser menos importante, el consumo de este alimento mejora el tránsito intestinal y contribuye en la pérdida de peso. Así lo confirma un artículo de Mejor con Salud, escrito por Daniela Echeverri, quien lo califica como un ‘superalimento’.

Las semillas de chía tienen muchas proteínas. | Foto: Getty Images

Semillas de chía relacionadas con el peso corporal

Pero ciertamente, el portal web señala que hay una creencia popular que asegura que este alimento ayuda a adelgazar, una afirmación que del todo no es cierta porque no estimula el metabolismo para esto.

Sin embargo, se debe destacar que tiene un efecto llenura, así lo precisa Tua Saúde que argumenta que como tiene la capacidad de absorber agua esto contribuye en llenar el espacio del estómago.

La mejor manera de consumirla es mezclarla con alimentos saludables como la avena y el yogur natural, por ejemplo.

No se recomienda consumir excesivamente. | Foto: Getty Images

Semillas de chía relacionadas con la digestión

Además, sugiere que se deben hidratar estas semillas para mejorar la digestión, y combatir trastornos digestivos como el estreñimiento. Pero se debe hacer una precisión: de acuerdo con el portal si no se consume de esta forma, es perjudicial para el intestino.

Aunque anteriormente se hizo una lista de sus beneficios -disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares y de colesterol, entre otros-; la American Society for Nutrition en un artículo escrito por Jessica Currier, asegura que aún falta evidencia sobre las ventajas del consumo de chía, porque las investigaciones que se han realizado han sido en animales más no en seres humanos.

El estreñimiento es un trastorno digestivo. | Foto: Getty Images

¿Qué cantidad de semillas chía se debe consumir?

Asimismo, en la publicación “Ingestas dietéticas de referencia de vitamina C, vitamina E, selenio y carotenoides”, por la National Library of Medicine, señala que las cantidades de consumo diario de chía varían, por ejemplo, los hombres mayores de 58 años de edad deben comer 30 gramos, mientras que los menores 38 gramos. Las mujeres menores de 50 años, 25 gramos; y las mayores 21 gramos, información confirmada por Mejor con Salud.

Es entonces que cumpliendo con las medidas mencionadas, según la edad, una persona puede agregar semillas a sus preparaciones durante el día.

Las semillas de chía tienen muchas vitaminas. | Foto: Getty Images

Semillas de cáñamo

Otro tipo de semillas son las de cáñamo fuente de ácidos grasos que tienen un efecto antioxidante, aportando grandes beneficios a la salud del organismo, entre los que se encuentran: la mejora de la memoria, la prevención de enfermedades cardíacas y el tratamiento para contrarrestar el acné, explica en su portal, Tua Saúde.

Estas semillas al tener aceites como el omega-3 y el omega-6 tienen un efecto sobre “el daño oxidativo de las células”, por lo que ayuda a prevenir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, aterosclerosis, entre otros, agrega.