Recientemente, un grupo de expertos ha desarrollado un método que arroja resultados positivos en más de la mitad de los evaluados. Ha tenido efectos en las personas, ayudándolas a manejar la ansiedad.
El informe Reemplazo de hábitos de autoayuda en individuos con conductas repetitivas centradas en el cuerpo publicado por JAMA Dermatology reveló técnicas simples que ayudan a dejar de morderse las uñas y pellizcarse la piel con violencia. Algunas personas adquieren este mecanismo por motivos como el estrés y se arrancan compulsivamente el pelo. Los expertos a cargo del estudio dijeron que el método podría ayudar a reducir tales comportamientos repetitivos.
En su estudio, se demostró una estrategia llamada ‘Reemplazo de hábitos’, la cual ayuda a reducir tales comportamientos en personas que sufren de comportamientos repetitivos relacionados con el cuerpo (BFRB). La técnica publicada consiste en frotar suavemente las yemas de los dedos, las palmas de las manos o la parte posterior de los brazos al menos dos veces al día. Los resultados mostraron que alrededor del 53 % de los participantes del estudio tuvieron un efecto positivo, en comparación con alrededor del 20 % en el grupo de control.
El estudio duró seis semanas, tiempo durante el cual el equipo científico estudió a 268 personas que padecían tricotilomanía (arrancarse el cabello por estrés o como mecanismo para calmarse) o que se mordían repetidamente las uñas o el interior de las mejillas.
Las situaciones estresantes avanzan con más rapidez sin demasiada presión. El efecto más notable en los participes del estudio fue en los mordedores de uñas. La mayoría de las personas dijeron que estaban contentos con la técnica y la recomendarían a sus amigos.
Los investigadores dividieron aleatoriamente a los voluntarios en dos grupos. A los primeros se les proporcionaron manuales y videos que mostraban cómo desarrollar nuevos hábitos menos dañinos y frotarse suavemente las yemas de los dedos, las palmas y los brazos cuando sienten la necesidad de morderse las uñas o hacer algo dañino.
Se animó a estas personas a practicar nuevos hábitos incluso si no sentían la necesidad de tirar, pinchar o morder. En cambio, a las personas del grupo de control se les dijo que estaban en una lista de espera para recibir tratamiento y que recibirían capacitación para el reemplazo de hábitos solo después de que se completara el estudio.
Aproximadamente el 80 % del grupo de tratamiento estaba satisfecho con la capacitación y el 86 % la recomendaría a un amigo, como se describe en los artículos de investigación publicados. La técnicas de reemplazo de hábitos parecen ser particularmente beneficiosas para los que se muerden las uñas.
Esta técnica es una adaptación de otros métodos conductuales para el comportamiento repetitivo centrado en el cuerpo, como el entrenamiento de inversión de hábitos y lo que se denomina desacoplamiento. Algunos medicamentos (como los antidepresivos) se prescriben ilegalmente a personas con comportamientos corporales repetitivos, pero no existen fármacos específicos para esta afección sin la aprobación de expertos de salud.
La desvinculación rompe hábitos tomando pasos similares pero cambiándolos al final. A modo de ejemplo los expertos señalaron que al morderse las uñas, puede acercar la mano a la cara y tocar la oreja en lugar de tocar la boca. El entrenamiento de reemplazo de hábitos del estudio es único porque su objetivo es reemplazar las sensaciones agradables de tocar y tirar con algo agradable pero no dañino: un toque suave.
El manual de ejercicios del estudio aconseja evitar la presión excesiva, como el contacto físico brusco, frotarse en la ducha y cepillarse los dientes enérgicamente. La idea entonces fue encontrar una técnica diferente que pudiera ser más adecuada para estas personas que no responden. La capacitación también sugiere mimarse intencionalmente con masajes, baños tibios y aplicaciones de crema.