Un día antes de terminar el año, miles de personas acostumbran a limpiar sus hogares de pies a cabeza. Desde el rincón más escondido de la casa hasta las paredes, techos, ventanas, closet, baños y cocina. Y, por supuesto, a esto no podría faltarle un buen aroma que refleje el resultado final del aseo. En el mercado existen muchas opciones distintas con olores, mezclas y esencias para aromatizar los ambientes. Pero, ¿qué mejor opción que preparar un ambientador natural hecho en casa?
En contexto, un ambientador según la RAE es una sustancia para perfumar el ambiente o para eliminar malos olores. Por eso, a lo largo de los años se han creado muchos tipos de ambientadores: aceite esencial, varillas de incienso, aerosoles, velas perfumadas, difusores con enchufe y mikados (varillas de madera dentro de un ambientador líquido).
Un estudio realizado por la OCU afirma que algunos ambientadores, aceites e inciensos emiten más benceno que el tabaco. Para la prueba, analizaron 22 ambientadores de uso doméstico que para difundir aroma necesitan calor de manera directa o indirecta (velas perfumadas, aceites de quemar e inciensos) y su conclusión fue que muchos empeoran la calidad del aire.
De todos los ambientadores que se analizaron, los únicos que aprueban son las velas. Tanto los aceites como los inciensos terminan por emitir partículas, compuestos orgánicos volátiles, sustancias alergénicas, benceno y el denominado formaldehído, un compuesto muy dañino. Por esa razón, es mejor realizar un ambientador casero con base de alcohol que es totalmente inofensivo, ya que muchos de los que venden en el mercado pueden llegar a ser muy perjudiciales para la salud.
¿Qué sustancias dañinas tienen los ambientadores?
Partículas finas: Éstas son las que se desprenden por ejemplo al quemar el incienso, como son pequeñas (menos de 2,5 micras) se alojan en los pulmones y pueden provocar problemas respiratorios.
Benceno: Es un hidrocarburo aromático de fórmula molecular C6H6. Según la OCU, este compuesto químico tóxico es capaz de causar leucemia en humanos. No debería estar presente en ningún ambientador, pero lo encontraron en todos los inciensos y en algún aceite (aunque en menor medida).
Formaldeído: Es un compuesto químico altamente volátil e inflamable. Puede causar dolor de cabeza, inflamación de la mucosa nasal y cáncer del aparato respiratorio, según la OCU.
Alérgenos: Son aquellas sustancias que pueden inducir una reacción de hipersensibilidad (alérgica) en personas susceptibles que han estado en contacto previamente con ellas. La OCU buscó las 26 sustancias más alergénicas que la Unión Europea obliga a identificar en los cosméticos y hallaron hasta 13 en un único producto.
Sustancias irritantes: En el estudio utilizaron el acetaldehido como referencia, que no debería superar los 200 µg/m3, pero lo hace en 3 aceites y un incienso. Es un líquido volátil, incoloro y con un olor característico ligeramente afrutado, es 20 veces más tóxico que el alcohol.
Recomendación:
- Ventilar la casa es la mejor opción para mejorar la calidad del aire.
- No usar este tipo de ambientadores ( inciensos, aceites de quemar ) como un hábito. No limpian el aire ni suprimen malos olores.
- No usar ambientadores en lugares que carezcan de ventilación ni en presencia de niños, embarazadas o personas que padezcan alergia o asma. Mejor velas y no de manera habitual.
Ambientador casero con cítricos y canela
Ana del blog Orgánicus, sugiere esta receta para tener un gran ambientador en casa completamente natural; este ambientador es con base de alcohol, y funciona de la siguiente manera: el alcohol se encarga de extraer todos los principios activos y sustancias contenidas en las células de la planta que se le añada. Por lo después de unos días se coloreará:
Ingredientes
- Alcohol de farmacia ( sirve vodka o cualquier otro alcohol )
- Corteza de naranja, limón, romero, canela en rama (estos ingredientes son al gusto)
Preparación
- En primer lugar se coge un frasco de vidrio, se llena con los ingredientes ( romero, naranja etc )
- A continuación se añade el alcohol hasta arriba.
- Luego, cerrar el frasco muy bien.
- Guardar el frasco en un lugar fresco y oscuro durante 10 a 15 días. Pasado este tiempo, se filtra la mezcla.
Advertencia: la mezcla mancha. Por eso a este proceso se le llama tintura, porque con él se extrae también los colores de la planta.
- Si se utiliza una planta seca: la cantidad de alcohol debe ser en una proporción 1:5, es decir, por 100 gr de planta seca se utilizarían 500 ml de alcohol.
- Si se utiliza planta fresca: la cantidad de alcohol que se necesita es menor y la proporción sería 1:2, es decir, por 100 gr de planta necesitaría 200 ml de alcohol.
¿ Cómo utilizar el ambientador?
- Mikado: poner la mezcla en un frasco con boca estrecha (para que no se evapore muy rápido el alcohol) y poner unos palillos de mikado.
- Pulverizador: esta opción se puede utilizar para pulverizar unas piñas, una planta seca o algo poroso para que se empape de alcohol y éste se vaya evaporando poco a poco.