Por lo general, las personas no tienen en cuenta que en los centros de acondicionamiento físico se debe ser precavido, esto porque hay posibles riesgos de contraer infecciones de la piel. Al apoyarse en alguna máquina para realizar algún ejercicio, la persona que utilizó la herramienta deja rastros de sudor y otros elementos que pueden ocasionar hongos y bacterias.

De acuerdo con la revista Mejor con Salud, las infecciones de la piel más comunes que se trasmiten en los gimnasios son el pie de atleta, tiña inguinal, impétigo, entre otras. Además, si se entrena es un espacio cerrado, donde no hay ventilación, es probable que haya infecciones respiratorias como resfriados o gripa.

Según un estudio hecho en 2014, se han encontrado distintos tipos de bacterias en las máquinas para ejercitar, en los pasamanos de las escaleras y en las manillas de los sanitarios de los centros de acondicionamiento físico.

Por otra parte, existen diversos factores de riesgo que contribuyen a la aparición de infecciones de la piel en el gimnasio, entre ellas se encuentra el roce entre los deportistas de contacto, la presencia de heridas abiertas, el uso de toallas comunes, compartir implementos y equipos, y caminar descalzos en salas de baño.

Infecciones de la piel más comunes en los gimnasios

  • Infección por estafilococos: En los gimnasios se encuentran las bacterias del grupo conocido como estafilococo, así como aquellas resistentes a la meticilina, que pueden vivir en máquinas, bancas de ejercicio y en alfombras hasta por varios días.

La infección por estafilococo parece al inicio una picadura. Luego se convierte en una ampolla que se torna roja y se inflama, causando dolor. También puede llenarse de pus, señala Mejor con Salud. Para su tratamiento es aconsejable acudir al médico para que le recete un antibiótico.

  • Piel de atleta: Es una de las enfermedades más frecuentes en personas que practican deportes. Se produce por un hongo que se puede contraer al caminar descalzo en pisos mojados, en áreas como baños o piscinas, o al usar calcetines o zapatos húmedos. Inicialmente, se caracteriza por el enrojecimiento de la piel entre los dedos y la descamación. A veces, puede extenderse a otras áreas del cuerpo.
Las infecciones de la piel más comunes que se trasmiten en los gimnasios son el pie de atleta, tiña inguinal e impétigo. | Foto: Getty Images
  • Tiña inguinal: esta es causada por hongos que crecen en ambientes húmedos. Además, también la puede ser causada por la ropa sudada y las toallas mojadas. Por lo general, los síntomas que se presentan son similares a los de una alergia e incluyen enrojecimiento, comezón, descamación y ampollas en la ingle. Una característica particular de esta afección es que es muy común en los hombres y se puede presentar con mayor frecuencia en la zona de las axilas. Para el caso de las mujeres, se puede dar debajo de los senos y se debe tratar con antibióticos.
  • Foliculitis: es causada por una bacteria conocida como Pseudomonas aeruginosa, que se puede encontrar en jacuzzis y piscinas cuando los niveles de cloro se encuentran bajos. Al comienzo, se manifiesta como manchas rojas y puede haber comezón que forman ampollas en los folículos. A menudo no hay un tratamiento específico, aunque si los síntomas se mantienen, se deben aplicar antibióticos tópicos.

Recomendaciones para prevenir infecciones de piel en los gimnasios

  • La primera y principal medida es, lavarse las manos, antes y después de entrenar, para evitar contagiarnos y para evitar transmitir enfermedades.
  • Al terminar de hacer ejercicio, y sobre todo después de nadar en una piscina, se debe duchar y cambiarse la ropa sudada.
  • Las colchonetas y guantes deben ser considerados objetos de empleo personal. Pero si el uso es colectivo, estas piezas se deben desinfectar con abundante alcohol.
  • Si se tiene heridas recientes, lo recomendable es cubrir con un vendaje o apósito cuando vayamos a entrenar.