Volver a la rutina resulta a veces complejo para adultos y niños, luego de pasar algún tiempo en vacaciones, por lo que el tiempo prolongado de descanso acaba. Por ello, es importante seguir algunas recomendaciones.
El doctor José Manuel Moreno, director del Departamento de Pediatría de la Clínica Universidad de Navarra, recomienda “ir recuperando la rutina estos días, para no pasar de cero a cien desde el minuto uno”, vigilando la higiene del sueño, implantando una ‘dieta’ de pantallas y realizando comidas en familia.
Sobre el sueño, Moreno Villares anima a los padres a establecer un tiempo suficiente y una higiene que permita que los más pequeños duerman bien. En este sentido, recuerda que “los niños de entre 3 y 5 años deben dormir entre 10 y 13 horas al día, incluyendo las siestas”.
Aunque no todos necesiten las mismas horas de sueño, destaca que lo ideal es que los menores de 6 a 12 años duerman entre 9 y 12 horas.
En su opinión, es “clave” que se vayan a la cama a la hora prevista antes de que empiece el colegio, sin olvidar la preparación previa al sueño: actividades tranquilas, bajar el volumen de los ruidos en casa y la intensidad de la luz. “Por eso, entre otras razones, se leen cuentos antes de que los niños se vayan a dormir”, destaca.
Con respecto a los consejos relacionados con la consolidación de una dieta saludable, el director considera que “se habla mucho de lo que se debe comer y lo que no, y no tanto sobre cómo y con quién se come”.
Por ello, destaca la importancia de que los niños aprecien la coherencia sobre esas directrices en el menú de casa: “Planteamos a las familias compartir la mesa para comer o cenar al menos cinco veces por semana, especialmente en la medida en que van creciendo los hijos. Por supuesto, la televisión y los dispositivos móviles no están invitados a estos encuentros familiares”.
Pantallas en los menores
Ahora bien, el médico reconoce que, si bien es común ser más indulgentes con el uso de las pantallas durante el verano con los hijos, “ahora es el momento de retomar las riendas”.
Medline Plus registra que Los niños menores de 2 años no deben pasar ningún tiempo frente a una pantalla. [Por ello es clave que se] limite el tiempo frente a la pantalla de 1 a 2 horas al día para los niños de 2 años y más”.
La OMS en las Pautas sobre actividad física, sedentarismo y sueño para niños menores de 5 años publicadas en 2019, “no recomienda que los lactantes (menores de un año) pasen tiempo frente a los dispositivos”, según indica NatGeo en su portal.
Asimismo, el doctor aconseja que, en mayores de 6 años, se fomenten en casa los hábitos saludables en el consumo de pantallas que establezcan límites máximos de dos horas al día.
“Cada vez hay más evidencias sobres las consecuencias del uso indiscriminado de las pantallas a lo largo de la infancia relacionados con las dificultades de aprendizaje, el aislamiento social o los problemas de conducta”, indica.
En concreto, apunta a una publicación de Jama Pediatrics de este mes de agosto que analiza la influencia de la exposición a las pantallas en el primer año de vida. Según la investigación, a mayor tiempo de exposición a las pantallas en menores de un año, pueden hasta triplicarse las posibilidades de retraso en el desarrollo a los 2 y a los 4 años, especialmente en habilidades de comunicación y en capacidad para resolución de problemas.
Ante estas evidencias, Moreno Villares plantea la oportunidad de incluir un mensaje de advertencia al encender un dispositivo móvil, similar al que recogen las cajas de tabaco, que recuerde a los padres y cuidadores que “el uso de este dispositivo entre niños pequeños se asocia a problemas importantes en el desarrollo infantil”.
Para mejorar el ánimo antes de volver a la rutina, el doctor aconseja “poner a punto” el material escolar y contactar de nuevo con los amigos, entre otras actividades. También anima a los padres “hacer hincapié en los aspectos positivos del nuevo curso”.
En concreto, destaca la importancia de inculcar a los hijos lo positivo de “aprender cosas nuevas”, y anunciarles que “vivirán retos distintos e interesantes”. “Pero eso sirve de poco si nos ven a los padres quejarnos de la vuelta al trabajo o de lo cortas que han sido las vacaciones”, ha expresado.
*Con información de Europa Press.