El dolor en las articulaciones -en muchas ocasiones- no necesariamente obedece a enfermedades previas, sino a situaciones relacionadas con actividades físicas pesadas, la falta de uso, torceduras o esguinces.
Sin embargo, de acuerdo con los especialistas, también puede estar relacionado con artritis, bursitis y dolor muscular y sin importar la causa, ese dolor es molesto para quien lo padece.
Estos pueden aparecer en rodillas, tobillos, cadera y muñecas, entre otras. Un estudio de la Fundación Internacional de la Artrosis, OAFI, reveló que hombres y mujeres padecen por igual los dolores en articulaciones, aunque el 73 % de las mujeres, lo hacen con más frecuencia desde los 35 años, mientras que solo lo padece el 63 % de los hombres desde esa edad.
Entre las articulaciones más afectadas aparecen las rodillas, como las de mayor incidencia, 52 %, le siguen las de la columna vertebral, 40 %, y las de las manos, 25 %.
Los expertos señalaron que este tipo de dolor puede afectar única articulación, monoarticular, o a varias, poliarticular, y originarse en la misma articulación o fuera de ella, como en un ligamento, cartílago, tendón o músculo (fibromialgia, polimialgia reumática, bursitis, tendinitis, etc.)
Igualmente, indicaron que este se manifiesta a través de un pinchazo, dolor agudo, rigidez e inflamación en la articulación afectada y genera limitaciones en los movimientos, lo que genera una afectación a la calidad de vida, pero también hay otras señales que deben ser tenidas en cuenta.
Estas son: inflamación, calor y enrojecimiento articular, erupción cutánea, puntitos o manchas violáceas, dolor torácico, dificultad respiratoria o tos de inicio reciente o grave, dolor abdominal, fiebre, sudoración o escalofríos y enrojecimiento o dolor ocular.
Debido a que los síntomas suelen ser progresivos y pueden permanecer en el tiempo, se recomienda un tratamiento como prevención para evitar que se agrave el dolor.
Tratamientos
Teniendo en cuenta que se trata de este dolor hace parte de las enfermedades crónicas, son diferentes los tratamientos que se pueden aplicar para disminuirlo.
- Medicamentos: Se pueden administrar fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), corticoesteroides y paracetamol entre otros.
- Fisioterapia: Para recuperar y mantener la movilidad.
- Uso de férulas: La inmovilización de la articulación con una férula a veces es útil de manera temporal para aliviar el dolor.
- Aplicación de frío o de calor: Dependiendo del caso puede disminuir el dolor.
- Cirugía. Algunas articulaciones son reemplazables mediante cirugía, con lo cual se alivia el dolor y recuperamos la movilidad.
Remedios
Pero también existen algunos remedios con los que se busca reducir el dolor, que en la mayoría de los casos suele ser agudo.
Uno de ellos es con la linaza, que es la semilla de la planta Linum usitatissimum, la cual es usada para consumo humano, por ejemplo, en infusiones.
Así mismo, de la semilla se extrae el aceite de linaza, el cual es rica en ácidos grasos de las series Omega 3, Omega 6 y Omega 9.
Aunque la Linaza usualmente es conocida por su capacidad para reducir los niveles de colesterol malo en la sangre, también cuenta con propiedades antiinflamatorias debido al Omega 3, que es uno de los aceites esenciales que no solo sirven para mejorar el sistema cardiovascular, sino que también refuerza el sistema inmunológico, previniendo la aparición de infecciones alrededor de las articulaciones.
Los especialistas advirtieron, sin embargo, es necesario diferenciar entre el Omega 3 de origen vegetal y el Omega 3 de origen animal. Señalaron que, en este caso, se recomienda consumir el primero, ya que de lo contrario, se produce el efecto de inflamación que es el que se busca evitar.
Señalaron para reducir el dolor articular, la linaza se debe tomar dos cucharadas al día, ya sea de forma natural o como complemento a otros alimentos como los yogures, las ensaladas, etc., aunque es preferible consumirla sin cocinar para no perder las propiedades y evitar una mala digestión.
Entre otros remedios se encuentran el consumo de romero y el jengibre debido a que son un excelente antiinflamatorio y calmante para aliviar los dolores articulares.
Así mismo, la cúrcuma, por sus propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antioxidantes, que sirven para erradicar las infecciones provocadas alrededor de las articulaciones y la cola de caballo, ya que también tiene propiedades que lo hacen un excelente antiinflamatorio natural.