Las frutas son una opción perfecta para comer entre horas, pero también para desayunos, postres y meriendas. Solo cuatro de cada diez adultos consume al menos una fruta a diario, y normalmente suelen ser frutas fáciles de tomar, como manzanas, peras, plátanos, mandarinas, fresas o kiwis.

Sin embargo, otras como la piña se han convertido en una de las grandes olvidadas en los hogares, a pesar de que una de las frutas con mayor número de minerales y vitaminas y con diversas propiedades que la convierten en una de las más completas para la salud.

Por ello, gracias a sus nutrientes el consumo de piña resulta beneficioso para la salud dental y de los huesos. En cuanto a los dientes, gracias a la gran cantidad de bromelina (rica en azufre) que contiene, contribuye a tener unos dientes blancos y saludables.

Sin importar la forma como se consuma, esta fruta ayuda a eliminar la placa bacteriana, además de prevenir diferentes enfermedades que afectan las encías. Además, contiene altos niveles de vitamina C, ayudando a la creación de colágeno y ayuda a contener los elementos oxidantes que pueden en poner en riesgo la salud bucal.

La piña también contiene vitamina B y ácido fólico, los cuales evitan que los dientes se debiliten y que las encías se hinchen.

Es importante mantener una dieta balanceada para el bienestar de los dientes. | Foto: Getty Images

Esta fruta dulce contiene calcio, contribuyendo a blanquear los dientes de forma natural; además, aporta una gran cantidad de fibra obligando a quien la consume a masticar más veces, promoviendo saliva, que es la que finalmente ayuda a limpiar cada pieza dental.

Luego está el poder del calcio, entre los numerosos minerales que le acompañan. Este fortalece cada diente y aporta su grano de arena al blanqueamiento dental, donde tiene mucho protagonismo la enzima mencionada bromelina. Actúa como un quitamanchas natural que mantiene espléndida tu sonrisa.

Por otro lado, debido a que la cáscara de la piña tiene un alto contenido de manganeso, según la enciclopedia médica, MedlinePlus, este mineral es indispensable para proteger y mejorar la salud y calidad de los huesos.

Cuando se toma el agua de cáscara de piña, esta ayuda a reducir los niveles del colesterol LDL, también conocido como el colesterol malo, el cual es importante mantener controlado para la salud de la circulación sanguínea y así evitar infartos o enfermedades cardiovasculares.

En Mejor con salud explican una forma de preparar el agua con la cáscara de piña para recibir todo el beneficio que esta aporta al organismo.

Ingredientes

  • La cáscara de dos piñas medianas o una grande.
  • 2 ½ tazas de azúcar morena (500 g).
  • 3 litros de agua.
té de piña | Foto: GettyImages

Preparación

  • En primer lugar, se debe lavar bien la cáscara de la piña con la ayuda de un cepillo y con un poco de vinagre.
  • Se debe pelar la piña y dejar la cáscara con un poco de pulpa, y luego hay que cortarla en trozos pequeños.
  • A continuación se pone en un frasco grande de cristal en el cual se añade dos litros de agua y el azúcar morena.
  • Dejar el frasco a temperatura ambiente, entre 20 y 30 °C, durante dos días. Si hace más frío, podría tardar un poco más en culminar el proceso.
  • Pasado ese tiempo, colar la bebida, y se añade el litro de agua restante y se deja fermentar todavía 12 horas más.
La piña es rica en antioxidantes, al igual que su cáscara. | Foto: Getty Images
  • Para detener la fermentación, hay que conservar esta bebida en la nevera.
  • Como durante la fermentación los microbios consumen el azúcar, se puede endulzar la bebida con un poco de miel de abeja o estevia.