El clavo de olor es una planta que crece en áreas de Asia y América del Sur. De ella las personas utilizan los aceites, los capullos de las flores secas, las hojas y los tallos para hacer medicinas, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Asimismo, explicó en su portal web que en la industria manufacturera, el clavo de olor se utiliza en la pasta de dientes, jabones, cosméticos y perfumes, entre otros, pero no hay suficiente información confiable para saber cuál podría ser una dosis adecuada de clavo de olor o Syzygium aromaticum.
Adicional, la investigación preliminar muestra que colocar una solución en gel de aceite de clavo de olor sobre la piel puede ayudar a disminuir la picazón grave.
De igual manera, la biblioteca señaló que la investigación preliminar también muestra que la aplicación de aceite de clavo de olor en las palmas durante dos semanas ayuda a disminuir la transpiración excesiva en las manos. Además, que aplicar aceite de clavo de olor o gel de clavo de olor en la piel puede repeler los mosquitos durante un máximo de cinco horas.
Además, el clavo de olor se aplica, por lo general, directamente en las encías para tratar el dolor de muelas durante el procedimiento dental, entre otros usos relacionados. No obstante, existe evidencia científica limitada para apoyar estos usos.
Otros beneficios que se le atribuyen, pero con insuficiente evidencia son: halitosis (mal aliento), diarrea, alveolitis (osteítis alveolar), gases (flatulencias), indigestión (dispepsia), náuseas y vómitos.
Sobre la misma línea, el portal Cocina Delirante reveló que el clavo de olor también se puede utilizar para bajar de peso y la recomendación es hervir agua y agregarle 50 gramos de clavo de olor, 50 gramos de canela, 50 gramos de pimienta de cayena y 50 gramos de semillas de comino. Lo ideal es consumirla en ayunas.
No obstante, la anterior recomendación debe estar acompañada de una alimentación balanceada y saludable que incluya proteínas, grasas, carbohidratos y todos los nutrientes que el cuerpo necesita y algunas recomendaciones de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, son:
- Comer al menos cuatro porciones de vegetales y tres porciones de frutas diariamente.
- Reemplazar los granos refinados por cereales integrales.
- Comer cantidades moderadas de grasas saludables, como el aceite de oliva, aceites vegetales, aguacates, nueces, mantequillas de nueces y aceites de frutos secos.
- Elegir productos lácteos bajos en grasa, carne magra y carne de ave de corral magra en cantidades limitadas.
Además, para bajar de peso se debe aumentar la actividad física y los ejercicios de cardio —también conocidos como ejercicios aeróbicos— son los más implementados cuando se busca quemar calorías y reducir el peso corporal. Sin embargo, los que involucren pesas ayudan al cuerpo a quemar grasa mientras se construye masa muscular, lo que también funciona para acelerar el metabolismo.
De todos modos, las personas se preguntan cuál es la mejor hora para hacer ejercicio y, por tal razón los expertos aseguran que es una cuestión de preferencia, gusto y horarios. Lo importante es cumplir con los objetivos diarios.
Además, de acuerdo con Medline Plus, la pérdida rápida de peso puede ser útil para personas que tienen afecciones debidas a la obesidad y, para estas personas, perder mucho peso puede ayudar a combatir la diabetes, el colesterol alto y la presión arterial alta.
Sobre la misma línea, durante el proceso de pérdida de peso las personas pueden sentir ansiedad, rabia, tristeza o frustración y estos sentimientos podrían frenarlo, ya que aumentan las ganas de comer. Por consiguiente, es importante buscar alternativas diferentes como tomar agua, comer algún fruto seco o tomar un café en vez de comer en exceso, ya que esas emociones solo llevan a tener malos hábitos.