La avena es un cereal rico en proteínas, grasas saludables y un gran número de vitaminas y minerales. De acuerdo con algunos expertos, este es considerado uno de los alimentos más completos que existen, ya que aporta vitaminas B1, B2, B3, B6 y E, además de calcio, zinc, cobre, fósforo, hierro, magnesio, potasio, sodio; sin mencionar que es una buena fuente de fibra, lo que ayuda a la digestión y actúa como una opción natural para perder peso.

Beneficios de la avena

Reducir el colesterol

De acuerdo con el portal mejorconsalud.com “al ofrecer una buena dosis de grasas insaturadas (o “buenas”) omega-3 y 6 y betaglucano, la leche de avena puede reducir el colesterol malo (LDL) y los triglicéridos, al mismo tiempo que aumenta el colesterol bueno”.

Además, consumir leche de avena varias veces a la semana podría mejorar la salud cardiovascular al evitar la acumulación de grasa en las paredes de las arterias.

La avena contiene nutrientes para reducir el colesterol. | Foto: Ugreen

Evitar la indigestión

Muchas personas que beben leche de vaca tienen problemas gástricos o estomacales, ya que este lácteo contiene sustancias que no son fáciles de digerir.

Algunos beneficios de la avena consisten en que el estómago cuenta con las herramientas necesarias para digerirla, siendo ideal para los que sufren pesadez después de las comidas y otros trastornos gastrointestinales.

Receta para preparar leche de avena casera

Esta bebida puedes usarla en todas tus preparaciones tanto para elaborar licuados, batidos, un rico café, así como para cocinar y hornear hasta postres. Sigue está sencilla receta para preparar leche de avena.

Ingredientes:

  • 150 gr de copos de avena
  • 1 litro de agua
  • 1 cucharada de extracto de vainilla
  • 1–2 cucharadas del endulzante de preferencia
La digestión permite el aprovechamiento de los nutrientes de los alimentos. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Preparación:

Dejar reposar los copos de avena en un recipiente con agua durante al menos 30 minutos, de preferencia puede ser toda una noche.

Colar la avena y lavarla con agua. Vertir en el vaso de la licuadora junto con el resto de ingredientes, mezclar durante unos 2 minutos. Colar la leche de avena con una malla de tela o con un colador muy fino para separar el líquido de los restos de copos de avena.

Volver a colar 2 o 3 veces más para eliminar los restos por completo. Guardar la preparación en un recipiente hermético e ingerirla algunas horas después.

Otros beneficios de consumir avena

Proteger el sistema nervioso

“En caso de nerviosismo, inquietud y angustia, las personas pueden beneficiarse consumiendo leche de avena. Esta bebida sacia el apetito y, por ende, contribuye con la calma”, así lo refirió el portal gastrolaweb.com.

Así, tras una jornada repleta de obligaciones y problemas, nada mejor que una taza de leche de avena tibia con miel antes de irse a la cama y disfrutar de una buena noche de sueño, lejos del insomnio.

Como la avena contiene cierta cantidad de vitaminas del grupo B, se dice que consumir leche de avena también ayuda a proteger el sistema nervioso y mejorar las funciones cerebrales.

La avena fortalece los huesos. | Foto: Jan-Otto

Mejora los músculos y los huesos

El ingrediente principal hace que esta bebida vegetal tiene muchos nutrientes y proteínas que ayudan a fortalecer los músculos.

  • Si la persona hace ejercicio la leche de avena puede, por ejemplo, prevenir la aparición de calambres.
  • Y si pasa todo el día sentado en un escritorio, puede ayudar a reducir las contracturas.

Por otra parte aporta potasio, zinc y magnesio, tres nutrientes más que importantes para la formación y fortalecimiento de los huesos. Así las cosas, es recomendable en niños y en ancianos.

Ayuda a bajar de peso

A manera de conclusión, se debe mencionar que la bebida de avena puede funcionar como un perfecto regulador del apetito. Gracias a su propiedad saciante evita los atracones de comida a deshoras o el consumo de alimentos poco saludables. Además este cereal puede reducir la retención de líquidos. Es más dietética incluso que la leche desnatada, ya que no aporta grasas.