La circulación sanguínea es el movimiento regular de la sangre a través del sistema circulatorio. El principal encargado de este proceso es el corazón y cuando funciona óptimamente, ayuda al cuerpo a mantenerse sano, en especial, al sistema cardiovascular.

Mantener una buena circulación también se considera importante ya que a medida que la sangre avanza por el cuerpo, ayuda a distribuir oxígeno y nutrientes a las células del organismo y al mismo tiempo, elimina los desechos.

Aunque el corazón parece pequeño, es un músculo que logra bombear sangre por todo el cuerpo a través de los vasos sanguíneos también conocidos como venas y arterias, por lo que entre mejor se encuentren, mejor salud vascular tendrá el individuo.

De hecho, la mayoría de los problemas circulatorios están asociados a las venas varices y aunque es una afección común, no significa que no se considere grave. Además, este problema ocurre cuando las personas han perdido elasticidad en sus venas y carecen de fuerza para transportar de forma correcta la sangre.

Además de las varices también se pueden presentar otros síntomas como fatiga, mareos, dolor de cabeza, manos y pies fríos, dolor en las piernas, calambres musculares, latidos cardíacos irregulares, pérdida de cabello y sequedad de la piel, entumecimiento u hormigueo en partes del cuerpo, entre otros.

La circulación de la sangre es esencial para oxigenar al organismo. | Foto: Copyright Dazeley | Getty Images

Existen múltiples métodos para mejorar la circulación, sin embargo, todos deben ser consultados con el médico para evitar empeorar la afección, desarrollar una nueva o intervenir en algún tratamiento que se esté llevando a cabo.

Así mismo, hay también una variedad de consejos con los que es posible aminorar los síntomas de un problema derivado de la mala circulación. Por ejemplo, la revista Vidae, publicada a través del portal Mundodeportivo, listó una serie de estos para aminorar el dolor:

1. Usar medias compresoras: un estudio de 2018 encontró que las personas que usaron medias de compresión hasta la rodilla con una presión de 18 a 21 mmHg durante una semana, reportaron una reducción del dolor asociado con las várices, según el magacín Medical News Today.

El sistema circulatorio es el encargado de trasporta sangre oxigenada a todo el cuerpo. Foto: Getty Images. | Foto: Getty Images

2. Hidratar el cuerpo: el agua es fundamental para la salud cardiovascular del ser humano. Así lo explica la Fundación Española del Corazón: “Si bebemos menos agua de la que nuestro organismo necesita, pueden comenzar a fallar algunas funciones del organismo y que se vea comprometida nuestra salud cardiovascular”.

3. Practicar deporte: el ejercicio cardiovascular practicado con regularidad ayuda al sistema circulatorio y mejora la circulación. Trotar, correr o practicar bicicleta son los ejercicios más recomendados según expertos, esto porque el cuerpo mejora la capacidad de tomar y usar el oxígeno.

4. Evitar estar todo el día en la misma posición: una de las situaciones más comunes que ocasionan problemas circulatorios es cuando las personas pasan mucho tiempo en una misma posición, una situación que no es ajena para aquellos que trabajan frente a un computador y no se levantan de la silla por un largo periodo de tiempo.

5. Usar calzado cómodo: los pies resisten todo el peso del cuerpo y están en constante actividad durante el día, por lo que usar un mal calzado puede causar problemas de circulación, deformación ósea y fatiga. Por este motivo, más que un accesorio, los zapatos son una prenda importante para la salud.

6. Llevar una dieta sana: la alimentación también juega un papel clave en los procesos indicados de circulación, especialmente en las piernas que es una de las partes del cuerpo en donde más se manifiestan los síntomas. Entre los productos sugeridos están el aguacate, los huevos, el pescado y el ajo.