De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios; todo esto lo debe tener en cuenta si desea un estilo de vida sano.

Sin embargo, expertos en salud aseguran que la alimentación es lo más importante para obtener mejores resultados en su estilo de vida. Por eso recomiendan consumir la cantidad necesaria de frutas, verduras, carne, pescado y pollo. Además, fijarse en los superalimentos, especiales porque son más ricos en nutrientes, fibra y vitaminas. Dentro de este grupo se encuentran el aceite de oliva, el brócoli, las nueces, la calabaza, las legumbres, las espinacas, entre otros; pero el superalimento que aporta colágeno y es fuente de vitaminas es el chucrut.

También conocido como sauerkraut (en alemán) o choucroute (en francés), es el producto final de la fermentación de hojas de la col. Es popular en países como Francia, Alemania, Polonia o Rusia.

También es reconocido por ser un alimento probiótico, es decir, que contiene microorganismos vivos que ayudan a mejorar el funcionamiento de la flora intestinal. Aporta colágeno, ayuda a la cicatrización de heridas, tiene vitamina A, especial para el funcionamiento del corazón, los riñones y los pulmones; también mejora el tracto digestivo. Por otra parte, aporta vitaminas C, B1 y B2, estas últimas importantes para el sistema nervioso, interviniendo en el proceso del aprendizaje y la memoria.

Los alimentos de consumo diario que aportan más vitaminas

Una dieta balanceada es la clave para un cuerpo sano y para disminuir el riesgo de enfermedades no transmisibles. “Llevar una dieta sana a lo largo de la vida ayuda a prevenir la malnutrición en todas sus formas, así como diferentes enfermedades no transmisibles y trastornos. Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en los estilos de vida han dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios”, explica la Organización Mundial de la Salud.

Esta entidad precisa que en la actualidad las personas consumen más grasas, azúcares y sal, y hay otras que no consumen la cantidad suficiente de frutas, verduras y fibra dietética.

Es fundamental aprender a alimentarse. “Para lograrlo, es necesario el consumo diario de frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, leche, carnes, aves y pescado y aceite vegetal en cantidades adecuadas y variadas. Si lo hacemos así, estamos diciendo que tenemos una alimentación saludable”, indica el Ministerio de Salud de Colombia.

Según explican las Guías Alimentarias para los Estadounidenses 2020-2025, un plan de alimentación saludable:

  • Destaca la importancia de las frutas, verduras, cereales integrales y productos lácteos sin o bajos en grasa.
  • Incluye alimentos con proteínas como mariscos, carnes magras, huevos, legumbres, nueces y semillas.
  • Tienen una cantidad baja de grasas saturadas, grasas trans, colesterol, sal y azúcares agregados.
  • Incluye una variedad de alimentos con proteínas como mariscos, carnes magras, huevos, legumbres (frijoles y guisantes), productos de soya, nueces y semillas.

Alimentos ricos en vitaminas

Mejor con Salud, portal especializado en salud y cuidado personal, menciona cuáles son los alimentos de consumo diario que se caracterizan por un contenido alto de vitaminas.

Vitamina A: zanahorias y espinacas.

Vitamina B: las carnes de todos los tipos y lácteos.

Vitamina C: cítricos, kiwi, brócoli, pimentón, leche y espinaca.

Vitamina D: pescados (salmón, sardina, atún).

Vitamina E: huevos y vegetales de hoja verde. Frutos secos como almendras, avellanas y semillas de girasol.

Vitamina K: espinaca, perejil, acelgas, carne de res, huevo y cereales.

Recomendaciones

Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos mencionan algunas recomendaciones que ayudan a tener un cuerpo saludable:

  • Tener una dieta balanceada.
  • Mantenerse hidratado. Tomar abundante agua durante el día.
  • Moverse, hacer ejercicio y actividad física.
  • Dormir y descansar al menos 6 a 8 horas.
  • Moderar el consumo de alcohol.
  • Evitar fumar y los productos de tabaco.
  • Reducir la sal.
  • Limitar el consumo de azúcares agregados.