Los cuidados de la piel son fundamentales. Esta requiere de actividades diarias para mantener un estado óptimo, tanto de salud como estético y así, retrasar los signos del envejecimiento que hacen que la piel se vuelva más delgada y pierda grasa, tornándose menos suave y lisa.
Este órgano es el más grande que tiene el cuerpo en el exterior y se encarga de proteger al organismo de factores externos como bacterias o cambios en la temperatura, según explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Entre sus funciones también están el proteger al organismo, precisamente, de aquellas partículas que vienen del ambiente y pueden perjudicar o enfermar otras partes del cuerpo. También, posee cualidades insuperables en cuanto a impermeabilidad, autoreparación y eliminación de residuos, según Sanitas.
Medline Plus asegura que la luz solar es una causa importante del daño de la piel. Además, fumar cigarrillos también contribuye a tener arrugas. Incluso, aumentan con la cantidad de cigarrillos y el número de años que una persona fuma.
Así mismo, la falta de hidratación y una mala alimentación incrementan la probabilidad de desarrollar afecciones en la piel e incentivar el nacimiento de arrugas e imperfecciones como el acné. Por ello, es necesario tener una rutina de belleza diaria que se enfoque en el cuidado de la dermis.
Entre los anteriores se debe exfoliar la cara máximo tres veces a la semana para eliminar las células muertas que puedan obstruir los poros y generar problemas que afectan la estética y la salud de la piel. Aunque varios exfoliantes son de origen natural, antes de su aplicación siempre se debe consultar a un especialista.
Teniendo en cuenta lo anterior, la revista UnCOMO, publicada a través del portal Mundodeportivo, explicó que es posible realizar un exfoliante a base de azúcar y miel. Este, además de eliminar las células muertas, hidrata la piel y contribuye a reparar tejidos dañados.
Los ingredientes necesarios para su preparación son: media taza de azúcar blanco, tres cucharas de miel y dos cucharadas de aceite de oliva.
Procedimiento:
1. En un recipiente agregar el azúcar y la miel.
2. Revolver con ayuda de una cuchara hasta que se forma una especie de pasta homogénea.
3. Añadir el aceite de oliva y nuevamente mezclar hasta que todo se integre.
4. Limpiar el rostro con agua y jabón neutro para que los nutrientes penetren correctamente.
5. Aplicar el exfoliante por el rostro con la yema de los dedos.
6. Realizar movimientos circulares para estimular la circulación y eliminar células muertas.
7. Al momento de aplicar, evitar el contorno de los ojos y los labios.
8. Dejar actuar alrededor de 10 minutos.
9. Pasado el tiempo, enjuagar con abundante agua tibia.
10. Aplicar la crema hidratante de preferencia.
El medio especializado en belleza Glamour también indicó otra forma de utilizar el azúcar y la miel para exfoliar la piel. Para ello se deben seguir los siguientes pasos:
1. Triturar un banano hasta crear un puré.
2. Mezclar el puré con cuatro cucharadas de azúcar y dos de miel.
3. Limpiar el rostro para que los nutrientes penetren correctamente.
4. Aplicar la mezcla realizando pequeños masajes durante algunos segundos.
5. Retirar con abundante agua.
Cabe resaltar que antes de aplicar estos productos sobre el rostro se aconseja realizar una prueba de alergia en un área pequeña de la dermis, por lo menos, 24 horas antes.