Los dientes son una parte vital del rostro y la imagen personal, por lo que muchas personas se esmeran en mantenerlos siempre blancos, aunque esto no sea natural, pues, de acuerdo con el portal A de la Salud Dental, “los dientes naturales y sanos tienen tonos amarillos”.
Hay que decir que esta parte del cuerpo debe cuidarse, ya que están revestidos con un esmalte natural “que protege el diente. El esmalte es la sustancia más dura del organismo, pero si se daña tiene muy poca capacidad para autorregenerarse”, tal como informa el Manual MSD.
“Una persona adulta cuenta con 32 dientes permanentes: 2 incisivos centrales superiores y 2 inferiores, 4 incisivos laterales, 4 caninos, 4 primeras bicúspides (premolares), 4 segundas bicúspides, 4 primeros molares, 4 segundos molares y terceros molares o cordales”, agregan.
Sobre estas últimas, hay que decir que algunas personas tienen las cuatro cordales, algunas tienen tres, dos, una o ninguna, pues ello varía en cada persona. Incluso, hay algunos que tienen el espacio de las también llamadas ‘muelas del juicio’, pero estas nunca aparecen.
Sin embargo, uno de los factores a tener en cuenta, relacionado con su cuidado, es lo que se consume, ya que esto tiene gran influencia en el aspecto que tienen los dientes, sumado a la higiene bucal que se practique, pues en ello influyen los hábitos que se tengan y la manera en que se hace la limpieza bucal.
Según el portal Muy Saludable de Sanitas.es entre las principales causas de desgaste del esmalte dental se encuentran algunas bacterias que, con el consumo de varios alimentos, se convierten en ácido y hacen que dicha capa pierda minerales y se deteriore el diente.
“La caries, de hecho, es una enfermedad caracterizada precisamente por la destrucción de los tejidos del diente como consecuencia de la desmineralización provocada por los ácidos que genera la placa bacteriana”, explica el medio.
Muchos portales, clínicas odontológicas y profesionales de la salud aseguran que hay algunas formas de blanquear los dientes y eliminar las manchas que pueden aparecer en los mismos, por diversas razones. Algunas son naturales, y otros, son tratamientos médicos mediante procedimientos estéticos.
Así las cosas, uno de los métodos caseros y no complicados, dolorosos o incómodos, incluye hojas de salvia, una hierba que es antiséptica, de acuerdo con el sitio Ecología Verde, lo que quiere decir que es una sustancia antimicrobiana que evita a toda costa la putrefacción, es decir evita que algo se pudra.
Según Ok Diario, la salvia tiene “antioxidantes polifenoles, sustancias que ayudan al sistema Inmune a protegerse del daño oxidativo. Su capacidad antioxidante es entre 2-4 veces superior a la de las de la vitamina E, C y A”, lo que favorecería la buena salud de los dientes retrasando el deterioro.
¿Cómo utilizar la salvia para blanquear los dientes?
Conforme reposa en Mundo Deportivo, la salvia se puede emplear de diferentes formas. Una de ellas es tomar las hojas ya lavadas y frotarlas sobre la dentadura directamente. También se pueden masticar como si fuera un chicle.
Allí enfatizan en que esta acción debe realizarse con frecuencia en las noches, después de cepillar los dientes, para poder ver resultados favorables. Asimismo, se pueden realizar infusiones (en agua caliente, agregar las hojas por 4 o 5 minutos) y con esa agua que resulte, se pueden hacer enjuagues bucales e incluso gárgaras.
De igual manera, hay otro método y es añadir las hojas a la crema o pasta dental que se utilice habitualmente. De acuerdo con el portal MD, las hojas se pueden secar en el horno y ya secas en su totalidad, se agregan a la crema y se utiliza comúnmente, sin ninguna alteración.