La salud intestinal es uno de los aspectos más importantes en la vida de cualquier ser humano. Cuando el aparato digestivo funciona de forma adecuada no se presentan mayores problemas, sin embargo, si existen trastornos relacionados con el intestino grueso y delgado, los dolores en el abdomen se hacen insoportables.
Los trastornos intestinales más comunes que puede padecer una persona son la diarrea y el estreñimiento, las cuales son enfermedades totalmente diferentes, pero que afectan de una misma manera el sistema digestivo.
Sin embargo, el portal Cuerpomente dio a conocer una técnica sencilla de posturas invertidas de yoga (como Sirshasana o Sarvangasana) que sirven para limpiar el colon, la cual consiste en beber agua y conducirla hacia el intestino hasta que sea expulsada por el ano, “desbloqueando el estancamiento energético y sanguíneo a nivel de todo el aparato digestivo, produciendo una agradable sensación de bienestar”.
El método nombrado por el portal de salud es Shank prakshalana, el cual permitirá “limpiar el colon a fondo y eliminar integralmente los sedimentos del tubo digestivo. No obstante, es importante tener en cuenta algunas de las contraindicaciones que tiene el llevar a cabo esta postura, por lo que, lo recomendado es realizar esta práctica con la supervisión de un especialista médico.
“Sufrir una úlcera gastroduodenal activa u otras afecciones agudas de la mucosa del tubo digestivo o padecer disentería, diarrea, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa u otras enfermedades graves”, advirtió Cuerpomente.
Además, esta técnica deberá ser realizada en horas de la mañana y preferiblemente en ayunas. Inicialmente, antes de llevar cada uno esto, ejercicios, es indispensable beber agua caliente con una cucharadita de sal, de modo que deberá alternarse la toma de agua con los movimientos. Después de beber seis o siete vasos, aparecerá un impulso de evacuar.
“Primero las heces son normales, luego más blandas y, posteriormente, líquidas y amarillentas. Tras esta primera visita al lavabo es preciso beber más vasos de agua caliente salada, efectuar los movimientos y volver a evacuar. Se hacen nuevos ciclos hasta que el agua sale tan clara como entró, lo que, según el grado de incrustación del colon, puede requerir la ingestión de diez a quince vasos de agua”, precisó Cuerpomente.
Ejercicios para sacarlas heces acumuladas
Poco más de un minuto es el tiempo recomendado para cada movimiento. Inicialmente, se toma una posición de partida en la que deberá tener los pies separados 30 cm, dedos de las manos entrelazados, las palmas hacia arriba y la espalda bien recta. Luego, sin girar el tórax, inclinarse hacia la izquierda y la derecha, cuatro veces, de modo que a cada inclinación una parte del agua va del estómago hacia el intestino delgado.
Para el segundo ejercicio, el brazo derecho debe ir extendido horizontalmente y el izquierdo debe permanecer doblado hasta que el pulgar e índice de la mano izquierda lleguen a la clavícula derecha. Luego, se dirige el brazo extendido atrás, efectuando una rotación del tronco, tratando de llegar lo más lejos posible, y siguiendo el movimiento con la mirada, de manera que la cabeza también gire. Este mismo procedimiento deberá ser ejecutado hacia el otro lado. Este doble movimiento se repite cuatro veces.
La tercer técnica corresponde a ubicarse en posición de flexiones de brazos, pero arqueando al máximo la espalda hacia atrás. Los pies están separados unos 30 cm y solo tocan el suelo los dedos de los pies y las palmas de las manos. Luego, girar la cabeza, los hombros y el tronco hasta que se vea el talón opuesto. Por último y sin detenerse, volver a la posición inicial y repetir por el otro lado, por cuatro veces.
“Para terminar la sesión, la posición será en cuclillas, con los pies separados 30 cm, los talones colocados hacia el exterior de los muslos (no bajo las nalgas), y las manos sobre las rodillas, que están separadas unos 50 cm. Luego, girar el tronco y colocar la rodilla izquierda en el suelo, delante del pie opuesto. Las palmas empujan alternativamente el muslo derecho hacia el lado izquierdo y el izquierdo hacia el derecho dejando que se comprima una mitad del vientre para hacer presión sobre el colon. Para acentuar la torsión del tronco y la presión sobre el abdomen hay que mirar hacia atrás”.
Cabe recordar que después de llevar a cabo estos ejercicios, lo ideal es evitar el frío, ni consumir ningún alimento en media hora, pero tampoco dejar el tubo digestivo vacío durante más de una hora. A su vez, los expertos en el tema recomiendan que ese primer alimento este conformado por arroz blanco, acompañado con zanahorias bien cocidas. También, en 24 horas no conviene tomar yogur o queso, ni bebidas ácidas o fruta cruda.