La piedra de alumbre es un elemento poco conocido, pero con una gran relevancia en la belleza. Sus beneficios van desde estimular la producción de colágeno hasta cumplir el rol de desodorante natural.
Este objeto está compuesto por sales de origen mineral, como aluminio y potasio. Es semitransparente y de color blanco. Para sacarle provecho, no se requiere gran cosa, debido a que bastará con comprar en la tienda la piedra y tener agua a la mano.
Si bien no es tan popular en la actualidad, históricamente la piedra de alumbre ha estado ligada con la belleza y cuidado personal. La investigación Minería histórica del alumbre en la Comarca Andorra - Sierra de Arcos (S. XVI - XIX) señala que este elemento fue importante en las civilizaciones españolas de los siglos XV y comienzos del XX.
En la sociedad antigua era considerado un mineral frágil y transparente, el cual no era frecuente en la naturaleza y en ciertas ocasiones tocaba crearlo artificialmente para gozar de sus beneficios.
Desde mediados del siglo XV, los cristales de alumbre eran imprescindibles en el curtido de pieles. Al hervir la piedra con los tejidos y colorantes, las prendas incoloras tomaban cualquier color deseado; es decir, el alumbre era capaz de darle vida a la ropa de la época sin riesgo a dañar las telas. Del mismo modo, cuando se calcinaba, el polvo blanco que se generaba era empleado en la medicina como astringente.
Por su importancia en el sector textil, era uno de los elementos más cotizados en la minería. Sumado a ello, su poca aparición en la naturaleza lo hacía más exclusivo. No obstante, a medida que se explotó en gran medida su extracción y uso, los yacimientos de alumbre, este elemento empezó a ser escaso en la sociedad, optando por producirlo artificialmente.
En los tiempos actuales, la piedra ya no se usa ampliamente para darles color a las prendas, sino que ha incursionado en el cuidado personal y belleza. El Instituto Nacional del Cáncer de México apunta que uno de los beneficios de la piedra es su propiedad de desodorante, haciendo que esa una mejor opción que los productos comercializados en farmacias y tiendas.
Sin lugar a dudas, la sudoración es un proceso vital para el cuerpo, dado que es el modo por el cual se eliminan sustancias de desechos y toxinas. Además, mantiene el pH de la superficie corporal en óptimas condiciones, conserva la hidratación de la piel, regula la temperatura corporal y principalmente evita malos olores.
Empero, los desodorantes que se encuentran en las tiendas a veces pueden manchar la ropa, irritar la piel o ser peligrosos, por lo cual una opción natural es más viable.
Ahí es donde aparece la piedra de alumbre. Su funcionamiento es sencillo por el hecho de que la piedra en seco se mantiene neutra y cuando se humedece, el alumbre entra en disolución y libera iones de aluminio; estos son los encargados de obstruir los poros y no generar el efecto transpirarte. Para sacarle provecho, bastará con mojarla y luego frotarla en las axilas u otras partes del cuerpo.
La ventaja que tiene sobre los otros desodorantes es que no mancha la ropa ni la piel. Al no contener grasa, no genera ese efecto negativo, el cual tiende a ser incómodo en las personas. Adicionalmente, no genera irritaciones, por lo que es recomendado para las personas con piel delicada y forma una capa que inhibe la entrada de bacterias olorosas.
A partir de sus propiedades astringentes y antibacterianas, este mineral también es opcional para las personas que se afeitan con regularidad. La piedra puede usarse para los pequeños cortes realizados por la máquina, cicatrizando la herida en poco tiempo. Igualmente, se puede mezclar con agua para volverla un perfume.