Las enfermedades cardíacas continúan siendo una de las principales causas de muerte en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. De acuerdo con las más recientes estadísticas de vitalidad del Dane, las enfermedades isquémicas del corazón (infartos) han vuelto a ocupar el primer lugar entre las causas de muerte en Colombia, entre el cuatro trimestre de 2021 y lo corrido de este año.
Según sus datos, se resalta que se presentaron 14.293 defunciones de mujeres en lo corrido del año 2022 por esta causa, representando al 18,1 % de los decesos ocurridos en el país.
Esta no es una realidad única en el país, ya que según cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), en España mueren más mujeres que hombres a causa de enfermedades cardiovasculares.
Como lo explica Mayo Clinic, pese a que las enfermedades cardíacas afectan tanto a hombres como a mujeres y ambos grupos están propensos a sufrir un infarto de acuerdo con sus condiciones de salud, en ocasiones las mujeres desconocen los signos de alerta de un infarto, ya que los síntomas pueden ser distintos a los de los hombres.
¿Cuáles son los síntomas de un infarto en la mujer?
Pese a que algunos síntomas de un infarto, como el dolor en el brazo izquierdo, son conocidos por la mayoría de la población, otros tantos pueden pasar desapercibidos. De esa forma sucede con las mujeres, ya que los expertos en la salud han señalado que los signos de alerta tienden a confundirse con otras molestias, puesto que los dolores son menos específicos, según explica Paola Beltrán, coordinadora del Grupo de Trabajo de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) Mujeres en Cardiología, citada por el blog Fundación del Corazón.
De acuerdo con Mayo Clinic, uno de los síntomas comunes de un ataque cardíaco en las mujeres es un dolor en el pecho, como una presión o incomodidad, que puede ser constante durante unos minutos o intermitente.
Esta es la primera señal de alerta; sin embargo, como explica el mencionado portal, es posible que sea un síntoma que se pase por alto, ya que algunas veces este dolor puede no ser intenso o inclusive no presentarse, particularmente en las mujeres.
Entre otros síntomas que están relacionados con un infarto en las mujeres y que son más propensas a experimentar en comparación con los hombres son:
- Dificultad en la respiración
- Dolor en uno o ambos brazos
- Cansancio inusual
- Acidez estomacal o indigestión
- Aturdimiento o mareos
- Sudoración
- Náuseas o vómitos
- Molestias en otras partes del cuerpo, como el cuello, la mandíbula, los hombros o en la zona superior del abdomen.
Asimismo, señalan los expertos de Mayo Clinic, estos síntomas suelen aparecer con más frecuencia durante el descanso o en reposo en el caso de las mujeres, lo cual también dificulta su atención pertinente. Además, se ha demostrado que el estrés emocional puede influir en la aparición de estos síntomas de un ataque cardíaco.
Existen algunos factores de riesgo que deben considerar las mujeres y tener en cuenta para cuidar la salud de su corazón y prevenir un infarto: entre estos se encuentra padecer de algunas enfermedades de base como la diabetes o enfermedades inflamatorias.
Otros aspectos de tipo genético, como antecedentes familiares de enfermedades cardíacas, pueden aumentar las probabilidades de las mujeres de padecer esas mismas afecciones y sufrir un infarto.
Además de estos factores, se enlistan otras condiciones que pueden aumentar el riesgo de presentar un ataque cardíaco, explica Mayo Clinic, como el estrés emocional y la depresión, la falta de actividad física, la menopausia, complicaciones durante el embarazo, así como malos hábitos alimenticios y de consumo de sustancias como el cigarrillo.
Si bien es fundamental estar alerta a los síntomas que se puedan presentar, conociendo que no se experimentan como usualmente sucede en los hombres, una recomendación básica para proteger la salud del corazón es tener consultas médicas frecuentes y realizarse los exámenes correspondientes para descartar cualquier afección cardíaca. En especial, en aquellos casos que presentan otros antecedentes y factores de riesgo.